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Primero fue la sorpresiva caída del Real Madrid ante el Shakhtar Donetsk en Madrid, y después fue el empate 2-2 del Inter de Milán en el Guisseppe Meazza ante el Borussia Mönchengladbach, dejando en claro que el mote del grupo de la muerte para la zona B de la Champions League es cierto y será de los más equilibrados del torneo.

Para mala fortuna del Inter, sí estuvo el despliegue que Antonio Conte espera de Arturo Vidal, aunque el 'King' no estuvo fino en los dos goles de los alemanes, que hasta el 90' se estaban llevando sorpresivamente el triunfo en Italia. Posicionado como el volante central, el chileno barrió, quitó y se prodigó para llegar desde la segunda línea.

Para su mala suerte, una falta suya revisada en el VAR en el minuto 61 sobre Marcus Thuram fue validada como penal y anotado por Ramy Bensebaini. Fue el inicio de la laguna interista, que tuvo un buen primer tiempo con un activo Alexis Sánchez, quien se intentó conectar con Christian Eriksen y Romelu Lukaku. El 'Niño Maravilla' aporta frescura y chispa en la ofensiva, pero Conte lo reemplazó al entretiempo por nuevas molestias físicas, considerando que salía de una fatiga muscular.

El propio Lukaku abrió la cuenta al 48' tras una jugada que tuvo la participación de cinco interistas, incluido Vidal. Tras el empate, el Inter cayó en dudas y un pase rapidísimo a un toque de Florian Neuhaus pilló la espalda de Vidal con un destapado Jonas Hofmann que definió entre las piernas de Samir Handanovic al 84'.

Conte quemó las últimas naves con Marcelo Brozovic y Alessandro Bastoni, lo que liberó en la izquierda a Aleksandar Kolarov. El empuje final alcanzó para que Lukaku empatara en la boca del arco y salvara un punto.

"Alexis será evaluado, hay que verlo", dijo Conte sobre la situación de Sánchez tras jugar el primer lapso. El conciso parte médico del club indicó que sufrió una contractura en su aductor derecho. Exámenes definirán un eventual tiempo de baja que complicaría a la Roja.

El Shakhtar Donetsk, diezmado por un brote de coronavirus con hasta 10 bajas, le propinó ayer al Real Madrid una derrota en casa por 3-2 en el Grupo B de la Champions League. Con apenas un puñado de sus titulares habituales, el club ucraniano fue despiadado al contragolpe para irse al descanso con una ventaja 3-0 y resistió cuando el Madrid descontó con un par de tantos al comienzo de la segunda parte en un desierto Estadio Alfredo Di Stéfano.

El Madrid creyó haber rescatado el empate en los minutos de prolongación por cuenta del centrocampista uruguayo Federico Valverde, pero el gol fue anulado con el videoarbitraje debido a una posición adelantada del delantero brasileño Vinícius Júnior en la acción.

Los visitantes pegaron primero mediante el volante brasileño Tetê a los 29 minutos y aumentaron a los 33 por el autogol del zaguero madridista Raphael Varane. El delantero israelí Manor Solomon añadió el tercero a los 42. El Madrid reaccionó con un remate desde fuera del área de Luka Modric a los 54 y Vinícius Júnior anotó a los 59, segundos después de ingresar.

"Está claro que soy el responsable. Como la primera parte ha sido negativa para mi equipo, claro, algo no he hecho bien", dijo Zinedine Zidane.

Tras la estrepitosa eliminación en la Copa Libertadores la noche del martes en el Monumental ante el Jorge Wilstermann, ayer el plantel de Colo Colo tuvo libre y hoy se volverá a reencontrar pensando en el partido del martes ante Everton.

Para sumar malas noticias, ayer la ANFP informó que "acordó de manera unánime apelar al fallo de la Primera Sala del Tribunal Autónomo de Disciplina por la denuncia interpuesta por el Directorio de la ANFP por el caso del partido Colo Colo versus Antofagasta".

La asociación no quedó conforme con la multa económica de 490 UF y espera una nueva intervención del tribunal.

Antofagasta solicitó terminar el duelo y ganar los tres puntos.