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Detallan alcances de ley que crea el Servicio de Protección de la Niñez

Entre sus funciones, "Mejor Niñez" atenderá a 250 mil niños, niñas y adolescentes por año, y estará encargada de la reinserción y reparación de menores vulnerables.
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Uno de los hitos más relevantes de los últimos días en materia de protección a la infancia fue la promulgación de la ley que crea el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, Servicio Mejor Niñez. Entre sus funciones, "Mejor Niñez" atenderá a 250 mil niños, niñas y adolescentes por año, aproximadamente, y estará encargada de la reinserción y reparación de menores vulnerables. El foco ya no es sólo la provisión de oferta o la supervisión de los programas en general, lo central está puesto en el bienestar integral de cada joven en el sistema, independiente de su situación. Así, todos los procesos del Servicio tienen como objetivo principal la restitución de los derechos vulnerados y la reparación del daño causado por dichas vulneraciones.

Para el seremi de Justicia y DD.HH., Alex Meeder, este nuevo enfoque "que estamos empujando e impulsando con mucha fuerza se basa en criterios muy importantes: terminar con este trato institucionalizado, masivo, despersonalizado y darles un trato como personas, como niños y devolverles lo más posible el derecho a vivir en familia. Por eso vamos a tratar de no separar a los niños de sus familias".

Meeder añadió que entre las características de "Mejor Niñez" está el énfasis en el enfoque familiar. "Se priorizará el acogimiento familiar por sobre el residencial, terminando así con el modelo de residencias masivas que conocemos hasta ahora, y potenciando los programas de familia de acogida. Esto implica profesionalizar los programas, ampliar el perfil de los niños, niñas y adolescentes que atienden y aumentar los recursos asociados. Todo esto, con el objetivo de resguardar el derecho de los jóvenes a vivir y crecer en una familia", acotó.

En tanto, el ministro de Justicia y DD.HH. Hernán Larraín, recalcó que el fin del Sename es el primer paso institucional en virtud del cual toda el área de protección de la niñez vulnerable va hacia este nuevo servicio "Mejor Niñez". "La Subsecretaría de la Niñez se hará cargo de un nuevo modelo de intervención para garantizar los derechos de nuestra niñez vulnerable. Nos falta un segundo paso, que es la creación del Servicio de Reinserción Social Juvenil, que está en un estado muy avanzado y esperamos muy pronto que este culmine su tramitación legislativa y pueda también constituir el paso final para el término del Sename", dijo.

El secretario de Estado mencionó que antes de que termine la gestión del Gobierno del Presidente Piñera se habrá terminado el Sename, y que habrá nuevos servicios que se harán cargo de la niñez vulnerable y de los infractores juveniles. Habrá un nuevo trato para la niñez, que se lo merece", puntualizó.

columna de opinión

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La otra pandemia: la violencia contra las mujeres

N uestra sociedad convive hoy con otra pandemia igual o más grave que la provocada por el coronavirus, la violencia contra las mujeres o violencia de género. Y la emergencia sanitaria de 2020 no ha hecho más que agudizar esta crisis.

Según Naciones Unidas, la violencia de pareja afecta al 30% de las mujeres en todo el mundo y este año, debido al confinamiento prolongado a causa del covid-19 se podrían producir 31 millones de casos de violencia doméstica en el mundo.

La cuarentena obligatoria, las restricciones de movimiento y la disminución de los grupos de apoyo social y familiar, combinadas con el miedo, la tensión y el estrés de estos meses, han dejado expuestas a mujeres y niñas a sufrir violencia, al estar confinadas todo el día en casa con sus agresores, con un incremento de la frecuencia y los grados de violencia y con la agravante de no poder denunciarlo debido a la dependencia económica, al temor a las represalias o las dificultades de acceso a los medios para realizar la denuncia, entre otros factores.

El mensaje «quédate en casa» se convirtió para muchas mujeres en una sentencia de muerte, en el peor de los casos y, en otros, en una violación de sus derechos. Durante la cuarentena domiciliaria obligatoria, a las mujeres con historia de maltrato les ha tocado vivir las 24 horas junto a su agresor, aisladas, sin recursos y sin posibilidad de huir debido a las restricciones de movilidad, lo que en muchos casos resultó en muertes.

En nuestro país, el 80% de las denuncias de violencia intrafamiliar, corresponden a víctimas mujeres y hombres agresores. Aumentando en un 70% los llamados a números de emergencia por violencia contra las mujeres en contexto de pareja.

También han aumentado las denuncias de mujeres que han sido amenazadas por sus ex parejas para evitar que no hagan efectivo el cobro de las deudas de pensión alimenticia por medio del retiro del 10%.

Pero la violencia de género no solo se da en un contexto de pareja. Son millones las mujeres y niñas, que en nuestro país y en el mundo entero, sufren distintos tipos de violencia: laboral, institucional, económica, psicológica y sexual (La violencia sexual, es una de las violencias de género que tristemente es parte del continúo de la vida de las mujeres), trata de personas, especialmente con fines de explotación sexual (el negocio más lucrativo después del tráfico de armas y de estupefacientes), el matrimonio forzado, el acoso sexual en contexto laboral y educacional, el acoso callejero o cibernético, las insinuaciones sexuales, la violencia dentro de la pareja o de la familia, etc.

Otro tipo de violencia de género lo constituye el abuso, la falta de respeto y el maltrato durante el parto.

La violencia no es una cualidad inherente al sexo masculino, sino la consecuencia de un proceso de socialización que hace que niños y hombres adquiramos estos comportamientos violentos y agresivos. Por tanto, resulta de suma importancia, trabajar desde el colegio, educar en igualdad real, eliminar prejuicios y roles de género. Los niños y hombres también somos víctimas de este sistema, reproduciendo estereotipos agresivos.

Como sociedad, tenemos el desafío de eliminar la violencia de género. Y aunque queda mucho por hacer, es tarea de todos nosotros evitar que este drama se siga invisibilisando.

Necesitamos más y mejor educación, nuestros niños y jóvenes, merecen tener la oportunidad de ser formados en la cultura del respeto a la persona humana y el amor al prójimo. De nosotros depende lograrlo.

"La cuarentena obligatoria, las restricciones de movimiento y la disminución de los grupos de apoyo social y familiar, combinadas con el miedo, la tensión y el estrés de estos meses, han dejado expuestas a mujeres y niñas a sufrir violencia, al estar confinadas todo el día en casa con sus agresores, con un incremento de la frecuencia y los grados de violencia y con la agravante de no poder denunciarlo debido a la dependencia económica".

Cozut Vásquez González,, ex presidente regional PDC