Atrapan a 4 estudiantes por ataque a liceo porteño
Los imputados quedaron con la prohibición de acercarse al recinto de Quellón.
Con una salida alternativa quedaron los cuatro estudiantes que fueron detenidos in fraganti al interior del Liceo Rayen Mapu de Quellón, sin que lograran sustraer especies. Fueron formalizados por robo en lugar no habitado en carácter de frustrado.
El ataque delictivo se produjo recientemente y quedó al descubierto gracias al seguimiento de las cámaras de vigilancia que existen al interior del recinto emplazado en calle Presidente Ibáñez de la ciudad porteña.
Los antecedentes fueron entregados a personal del tercer turno de la Sexta Comisaría de Carabineros local que se constituyó de inmediato, hallando a tres mujeres y un adolescente, con edades que fluctúan entre los 16 y 19 años, escondidos en un baño y en una sala de clases.
Así fue informado por el teniente Luis Corvalán, de la unidad base quellonina, quien reportó que el personal fue apoyado por la Central de Seguridad ATI, encontrando "una ventana abierta en el sector poniente del inmueble, en el casino, y fuera de esta permanecía una silla, por lo que los funcionario efectuaron una inspección".
Sin hallar a nadie en el primer nivel, los uniformados centraron su rastreo en el segundo piso, donde ubicaron a los jóvenes, quienes fueron aprehendidos y remitidos al cuartel.
Dentro del mismo procedimiento, el director del liceo, Francisco Serón, se constituyó en el sitio del suceso comprobando la existencia de dos ventanas abiertas en el casino y la puerta del laboratorio forzada en su chapa de seguridad.
Encausados
En audiencia realizada con el Juzgado Mixto de Quellón se acreditó la legalidad de la detención de los imputados que fueron encausados por la fiscal (s) Paulina Otero, quien valoró el rápido accionar policial que impidió la sustracción de especies.
"Todos fueron formalizados por robo en lugar no habitado frustrado y se llegó a un acuerdo reparatorio con los directivos del recinto educacional, por lo cual los jóvenes quedaron con prohibición de acercamiento al recinto", expuso la persecutora.
Por su parte, el defensor Filippo Corvalán, quien representó a la menor del grupo -una estudiante de 16 años-, destacó el término procesal de la causa.
"Estamos conformes con la decisión tomada por el tribunal, puesto que se trató de un hecho que no afectó mayormente a la propiedad y se optó por un acuerdo reparatorio, que en el caso de la adolescente fue no acercarse al establecimiento por un plazo de tres meses", explicó el abogado.
Asimismo, el profesional remarcó que al cumplirse este tiempo "la causa se va a archivar y sobreseer definitivamente, como si nunca hubiese existido".