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Activistas exigen a salmoneras salir de ecosistemas frágiles

Ciudadanía, comunidades indígenas y científicos cuestionan el actuar de la industria en "sucesos conocidos de daño ambiental durante décadas". Ejecutivos defienden su postura y la regulación de su desempeño en la zona.
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César Cárdenas Ruiz

Su indignación manifestó un grupo de organizaciones socioambientales, comunidades indígenas y científicos, a raíz de lo ocurrido con el masivo vertimiento de material orgánico asociado a mortandad de salmones por una floración algal nociva (FAN) en centros ubicados en las regiones de Los Lagos y Aysén, específicamente en el fiordo Comau (Palena), e igualmente los canales Jacaf y Puyuhuapi.

De acuerdo a las últimas estimaciones, a la fecha, de un total aproximado superior a las 5 mil toneladas de mortalidad, 3 mil toneladas corresponden a los centros afectados en Los Lagos, lo que equivale al 12,7% de la biomasa activa en las agrupaciones de concesiones de salmónidos afectadas y más de 2 mil toneladas a la Región de Aysén, lo que corresponde al 2% de la biomasa activa en las concesiones locales.

Los activistas apuntan a los presuntos culpables y califican los hechos ocurridos, como un "grave evento de contaminación marina provocada por la industria salmonera que opera en el sur de Chile".

Como consecuencia, exigen "una salida urgente de estas compañías de todos los ecosistemas frágiles como son lagos, fiordos y canales donde operan", además de llamar a una moratoria inmediata a la expansión geográfica de estas compañías.

Se trata de una declaratoria que es encabezada y coordinada por el Movimiento Defendamos Chiloé. El oficio cuenta además con la firma de comunidades mapuche-williche,kawésqar y yagán, agrupaciones locales de la Patagonia, junto a reconocidas ONG como Greenpeace, Tompkins Conservation y el Centro Ecoceanos.

En la proclamación se afirma que han ocurrido "sucesos ampliamente conocidos de daño ambiental durante décadas y, por sobre todo, el carácter de permanente y estructural de diversos acontecimientos tanto o más graves que el actual, es que las organizaciones aquí firmantes venimos a exigir al Gobierno de Chile la moratoria inmediata de la expansión salmonera: no más entrega de nuevas concesiones, no más ampliación de concesiones acuícolas actuales ni aumento de biomasa en concesiones existente; así como también la urgente salida de todos los ecosistemas marinos frágiles como son lagos, fiordos y canales de nuestra Ecorregión Chilota y desde ésta a todo el maritorio patagónico".

Al respecto, Álvaro Montaña, integrante del Movimiento Defendamos Chiloé, agradeció "a las más de 60 organizaciones territoriales, ciudadanas, comunidades indígenas, organizaciones no gubernamentales ambientales y centros científicos que se han unido en una petición clara al Estado de Chile: las salmoneras deben retirarse de áreas de extrema sensibilidad ambiental, lagos y fiordos y que esta industria no debe crecer más".

Para el geógrafo, los mares de esta parte del país están ante un peligro constante, "si la industria continúa creciendo en producción hay riesgo de colapso del ambiente marino, con consecuencias laborales, sanitarias, ambientales enormes, ya lo vivimos el 2008 y el 2016, peligran los propios empleos de la industria salmonera, pero también los empleos asociados al sector bentónico, pesquero y mitícola", aseveró.

La posibilidad de asistencias económicas por parte del Ejecutivo -según Montaña- pudiera ser una vía de escape ante este escenario.

"El Estado debe subsidiar y apoyar a actividades económicas de poli-cultivos marinos de pequeña escala, de especies nativas y con gran valor agregado. Es hora que el Estado se ponga las manos en el bolsillo y apoye otras actividades económicas sostenibles, con capital de trabajo y subsidios, tal como lo hizo durante 30 años con las salmoneras, quienes hoy ya no requieren del apoyo del Estado. Estas actividades económicas generarán más y mejores empleos y con menores impactos sociales y ambientales", expuso.

Revisión

El ambientalista nacional Maximiliano Bello, experto en medioambiente y océanos, hizo una exhaustiva revisión sobre los diferentes efectos que tiene la producción de salmones en aguas chilenas del sur, y cómo esto podría afectar a la ecología endémica del territorio.

"No ha sido una sorpresa lo que sucede nuevamente en los fiordos de la Patagonia, uno de los lugares más prístinos y hermosos del planeta. Sin embargo, han estado impactados, en gran parte destruidos también, producto de un crecimiento indolente y desordenado de la salmonicultura, y hoy día nos preguntamos si estos eventos tienen o no relación directa con esta actividad", comentó.

En tal sentido, el profesional enfatizó en que las costas de Chile la industria del salmón no está ajena a algún grado de responsabilidad en estos eventos.

"Lo que sí sabemos por cierto, y por las imágenes que hemos visto estos días, es que la industria no ha tomado ningún resguardo, ni ha puesto la atención en mejorar ese problema, sino muy por el contrario aumentarlo, lo cual nos lleva a la siguiente pregunta, ¿entonces cómo vamos a ordenar esta actividad?", apuntó.

La industria salmonera ocupa el tercer puesto en exportaciones; no obstante, no son pocos los que han alertado sobre las consecuencias negativas que puede traer la práctica salmonera en distintos aspectos ecosistemas marinos.

Bajo esta coyuntura, Bello es claro al señalar que si bien es cierto, las firmas salmoneras han generado uno de los mercados más prósperos en el mercado acuícola, sus operaciones han incidido en el perjuicio medioambiental de esta parte del territorio nacional.

"Todos sabemos que para las regiones es importante económicamente, pero también es importante que sigamos avanzando en una salmonicultura a la altura que incluyen los costos ambientales, porque al final somos todos los chilenos los que pagamos por ese salmón. Sin embargo, son muy pocos los que ganan por ese salmón", exclamó.

Comunidades

Marieta Uribe, presidenta de la Agrupación Turística, Cultural y Medioambiental Mar y Tierra, también esbozó sus críticas frente al rubro salmonero, no solo desde una mirada de la polución en los mares, sino también por una "gran brecha de género en la industria".

"Como mujeres, reconocemos la interrelación e interdependencia que tenemos entre nosotras/os y nuestro medioambiente. En Hualaihué, hemos sido testigos de la devastación que la industria salmonera ha producido en los ecosistemas de ríos, humedales costeros y mar. Han arrasado no solo con la biodiversidad, sino que también atentan contra nuestra soberanía alimentaria, fuentes de economía local y han aumentado las brechas socioeconómicas en nuestra comunidad, perjudicando en mayor medida a las mujeres", consignó.

Añadió que "existe una gran brecha de género en la industria salmonera en empleabilidad, sueldos y vulneración de derechos, castigan la maternidad".

Salmoneras

La situación ambiental producida, tras la aparición de algas nocivas o "bloom de algas" ha significado pérdidas millonarias para las firmas involucradas.

Tras las críticas de los grupos activistas que exigen la salida de los centro de cultivo desde las denominadas aguas menores o ecosistemas marinos frágiles a causa de lo ocurrido en el fiordo Comau, Esteban Ramírez, gerente general de Intesal (Instituto Tecnológico del Salmón) de SalmonChile, hizo hincapié en las herramientas dispuestas para llevar a cabo un labor regulada en cada una de las localidades donde funcionan.

"Es relevante señalar que la salmonicultura es una actividad regulada, fiscalizada y que utiliza espacios marinos acotados. Respecto a esto último, a modo de ejemplo, el espacio utilizado por los centros de cultivo activos es equivalente al 2,2% de la superficie de Puerto Montt", detalló.

Puntualizó el directivo que "tenemos la convicción de que las actividades productivas, si bien tienen brechas que deben superar, son compatibles con el cuidado del medioambiente en la medida que la ciencia nos nutra de la información para avanzar en la tecnología, proceso continuo que en más de 30 años ha permitido superar grandes desafíos como el control del ISA y avances como la reducción de uso de pesca en el alimento de los salmones, pasando a fuentes vegetales como insumo principal".

Una mejor distribución de las áreas de trabajo, también aparece como un elemento de relevancia para mejorar la operatividad de los centros acuícolas.

"Se trabaja ahora en resolver las nuevas temáticas de preocupación. Por ello, continuamente como Intesal de SalmonChile, estudiamos diferentes formas de mejorar cada vez más la eficiencia de la industria y proponer medidas concretas, como la relocalización y fusión de concesiones, que permite tener menos centros y más distanciados, lo que permitirá mejorar el desempeño operacional y ambiental", esbozó.

Si bien es cierto, adelantarse a una posible FAN pudiera resultar algo indeterminable, el personero subrayó el trabajo que se ha venido desarrollando prácticamente en las últimas tres décadas.

"En los últimos 25 años, Intesal ha logrado consolidar un trabajo en materia FAN de más de 30 años de la industria, que se ha estructurado en cuatro pilares fundamentales: monitoreo, pronóstico del riesgo, ciencia y colaboración público-privada. Esto ha permitido mantener información actualizada de las FAN, aportar al desarrollo de una nueva regulación sectorial respecto a esta materia, las autoridades cuentan hoy con mejores herramientas, como la alerta acuícola, que permite una mayor articulación y agilidad en las respuestas ante las contingencias", declaró.

Uno de los capítulos recientes en la historia de este tipo de situaciones, los protagoniza indudablemente el denominado "Mayo chilote", tras la contaminación del mar por marea roja.

Con estos antecedentes, la fuente subrayó que "en los últimos años, la industria ha trabajado intensivamente en mejorar su capacidad de respuesta ante contingencias, respecto del 2016 se aumentó en más de tres veces el nivel de muestreo. La capacidad de almacenamiento de ensilaje en tierra creció también tres veces, adicional al aumento de capacidad por regulación que se exigió a cada centro, junto con un crecimiento proporcional en las plantas reductoras en las regiones de Los Lagos y Aysén y se sumó además la posibilidad de contar con pesqueros de altamar en la macro región para extracción rápida de mortalidad fresca y traslado a plantas de harina".

Sernapesca

Por su parte, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) dio por terminada la contingencia de mortalidad masiva de salmónidos por FAN de Aysén, habiendo retirado el 99,6% de la mortalidad. En cuanto a la mortalidad restante, confirmó que es normal para la etapa del ciclo productivo en el que se encuentran los peces en dichos centros de cultivo.

"La situación de contingencia por florecimientos algales nocivos en el fiordo Comau hasta ahora se mantiene estable. Nosotros hemos estado monitoreando y fiscalizando en el mismo lugar", precisó Branny Montecinos, director regional (s) de Sernapesca.

"Existe una gran brecha de género en la industria salmonera en empleabilidad, sueldos y vulneración de derechos".

Marieta Uribe