columna de opinión
Alcantarillado y agua potable en Quellón: desafío presente y futuro
Cuando hablamos de urbanización en comunas donde la historia habla de precariedad en infraestructura y servicios, se hace complejo abordarlo debido a la gran cantidad de temas pendientes en estos ámbitos, que sin duda afectan la calidad de vida y el desarrollo de los habitantes de esa comunidad.
En Quellón la situación de temas que guardan relación con obras sanitarias urbanas ha sido endémicamente deficitaria. No podemos olvidar que la comuna en el pasado tenía un gran componente rural y una baja actividad en el sector urbano, que probablemente incidió en que no se generaran grandes avances en infraestructura sanitaria para una población más bien escasa, particularmente en las décadas del '50, '60 y '70.
No fue hasta entrados los '80 que se produce un aumento significativo de habitantes en el casco urbano de Quellón, producto de la actividad económica basada en la extracción de los recursos de nuestro mar. De ahí en más, con una población creciente que copó espacios de la comuna que no estaban desarrollados urbanísticamente, comenzó a generarse un problema que desde entonces impacta el territorio.
En años recientes los cálculos sobre acceso de la población urbana de la comuna al sistema de alcantarillado y agua potable no superan el 60%. Una cifra que a todas luces refleja un problema serio que afecta la calidad de vida de la gente.
Para paliar esta compleja situación hemos venido realizando gestiones en todos los niveles de Gobierno, con el fin de darles una oportunidad a nuestras vecinas y vecinos de sectores críticos de poder comenzar a revertir esta realidad. Así es como hemos logrado echar a andar e implementar proyectos con el objetivo de dotar de agua potable y alcantarillado a quienes carecen de estos servicios por años.
"Algunos botones"
De muestra, algunos botones: recientemente se ha iniciado el proyecto de saneamiento del sector de Capitán Alcázar que abarca, además, el pasaje Neptuno y tramos de las calles Balmaceda y Santos Vargas, lo que considera una inversión cercana a los $520 millones de pesos y que permitirá resolver el histórico problema de abastecimiento de agua potable y recolección de aguas servidas mediante la extensión de las redes públicas de servicios sanitarios que benefician a cerca de 90 familias. Una iniciativa histórica y que ha demandado estudios de títulos de larga data para poder continuar adelante. Por la misma línea costera de la comuna se está trabajando en la extensión de la red publica de agua potable de calle Ernesto Riquelme, con el fin de aliviar la situación de aquellas vecinas y vecinos que residen en esa zona, obra que recibe una inversión cercana a los 70 millones de pesos.
En el sector alto de Quellón, específicamente en los pasajes Mirasol y Rucalín, se han ejecutado los proyectos de saneamiento sanitario y la construcción de alcantarillado para mejorar las actuales condiciones de vida de quienes viven allí. La inversión en ambos sectores supera los 110 millones de pesos. En el pasaje Hernández, en las cercanías de la Escuela Oriente, también se llevaron a cabo trabajos de alcantarillado, mejoramiento de redes de agua potable y la instalación de una planta elevadora de aguas servidas, obras que beneficiaron a 15 familias que ahora cuentan con mejores condiciones sanitarias.
Durante el 2018 ya habíamos inaugurado otra planta elevadora en el sector Capitán Alcázar-Estero Quellón, que permitió subsanar las molestias permanentes provocadas por desbordes de aguas servidas y todo lo que ello implicaba.
Falta mucho aún por hacer en temas de urbanización, particularmente en temas de agua potable y alcantarillado, pero estamos avanzando a un ritmo que no se vio en los pasados 30 años. Finalmente, asegurar a nuestros vecinos y vecinas que seguiremos tras el proyecto de la ampliación del radio operacional de Essal para dar condiciones de vida dignas a todos quienes habitan en el sector urbano de Quellón.
Agua potable, alcantarillado y urbanización son desafíos que bien vale la pena abordar.
"En años recientes los cálculos sobre acceso de la población urbana de la comuna al sistema de alcantarillado y agua potable no superan el 60%. Una cifra que a todas luces refleja un problema serio".