Vallespín asume con la meta de dinamizar la economía en la zona
Hoy a las 11 horas se realiza en Puerto Montt la asunción del decé como el primer gobernador regional de Los Lagos.
Hoy se inicia a una nueva institucionalidad en nuestro país: asumen los gobernadores regionales que fueron electos mediante sufragio universal, tanto en primera como en segunda vuelta, y los delegados presidenciales designados por el Presidente.
En la zona Patricio Vallespín (DC) hace historia como el primer gobernador regional de Los Lagos.
Carlos Geisse, quien pasa de ser el intendente al delegado presidencial tras ser confirmado ayer (ver pág. 3) luego de su renuncia del lunes, realiza todo el traspaso administrativo y financiero al Gobierno Regional, vale decir a Vallespín. Retiene todo lo que tiene que ver con seguridad y emergencias.
El decé arriba a su nuevo cargo acompañado de quien será el encargado de comunicación estratégica, Nicolás Díaz, por lo que una vez instalado verá la situación y la designación de los demás puestos de confianza.
Previo a ello, el exintendente y exdiputado quiere ver el estado en que se encuentra el GORE en materia económica. Por ello, estima que la próxima semana podrían existir novedades en cuanto a los nombres de quienes ocuparán dichos cargos.
Por ahora, su interés radica en realizar un estudio respecto al escenario que se le presenta para desempeñar su nuevo cargo.
En cuanto a sus prioridades, si bien también tiene que analizar el panorama de los proyectos que componen la cartera del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), estima que lo prioritario, no solo para la Gobernación Regional, sino que para las demás instituciones, es la inversión pública, de manera de dinamizar la región y así generar empleos y, por ende, ingresos para las familias, lo mismo que instalar mecanismos de apoyo a las pequeñas y medianas empresas de la región.
Otro punto importante para Vallespín es el trabajo que pueda realizar junto a los constituyentes, quienes tienen a cargo la redacción de una nueva Constitución.
A su juicio, es relevante el respaldo que le pueda otorgar a los convencionales, en el sentido de ver "cómo desde la región se pueden facilitar espacios de encuentros y de deliberación con la comunidad para que efectivamente la carta magna no solo sea de quienes participan en la Convención Constitucional, sino que también se baje a las comunidades".
Hasta el momento Vallespín ha sostenido reuniones con los constituyentes independientes y con los de la Unidad Constituyente. Y si bien no se ha reunido con los representantes de Chile Vamos en la Convención, cree que todos estarán disponibles para poder realizar este trabajo en conjunto en la región.
AGENDA
El democratacristiano quiere tener claridad respecto de los recursos con los que contará la Gobernación Regional. Por eso, en un primer momento, se abocará en el análisis de las prioridades y las áreas de trabajo estratégico que busca instalar, como el vínculo que pretende tener con los municipios y la construcción de una agenda de gestión desarrollo.
Otra área importante es la agenda de descentralización, así como el acento en el desarrollo social y en el del cuidado de los sectores que tienen más carencias en la región.
En cuanto a los proyectos, Patricio Vallespín está preocupado de la situación económica de la región. Más aún luego del anuncio gubernamental respecto de un recorte para la nueva institución y que en la región llegaría a los 73 millones de pesos. Sin embargo, tras los reclamos de las autoridades electas, esta medida fue dejada sin efecto de parte del Gobierno.
Aun así, el nuevo gobernador de Los Lagos piensa que es necesario que estas autoridades puedan participar del debate presupuestario, así como solicitar un complemento de recursos de entre un 20% y un 30% para que el Gobierno Regional emprenda nuevas iniciativas.
Sobre la situación en cuanto al plan de inversiones del FNDR, sostuvo que aún no conoce el detalle de las iniciativas y el estado en que se encuentran al no tener acceso a toda la información.
Pero cuando asuma se encargará de revisar si existe coherencia entre lo que se está haciendo y lo que quiere implementar, y si es que hay opciones en función de la evolución que tengan las iniciativas en ejecución y las que deberían venir.