Joven se va preso por agresión contra su pareja y su suegra en Castro
El sujeto fue formalizado por tres delitos. Su defensa acusa que también resultó herido en lo que calificó como una riña.
Tras las rejas quedó un joven al protagonizar un nuevo caso de violencia intrafamiliar (VIF) en la provincia. Y no solamente se vio afectada quien era su pareja, sino también su suegra. Por ello, fue formalizado por tres delitos, perpetrados al interior de un domicilio de la villa Chiloé de Castro.
Una ingesta alcohólica sería el contexto en que se produjo este incidente familiar en la calle César Vera, el cual fue denunciando ante Carabineros de la Segunda Comisaría local, que abordó el procedimiento de rigor.
Según los antecedentes entregados a los funcionarios policiales que se constituyeron en el lugar, tanto el imputado como su conviviente de 26 años, estaban compartiendo cuando por razones que se investigan, comenzó una discusión que rápidamente subió de nivel.
Como se informó, tras insultos mutuos, el obrero habría tomado del pelo a la mujer, para luego arrastrarla y arrojarla al piso, donde también le propinó una serie de golpes. La madre de la víctima habría intervenido intentando evitar esta golpiza, pero igual sufrió contusiones.
Los uniformados aprehendieron en flagrancia al encartado de iniciales M. A. S. A. (35), quien fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Castro.
En audiencia virtual realizada en las últimas horas, el defensor Mauricio Díaz incidentó la legalidad del operativo policial.
"Si bien, las afectadas tenían lesiones, mi representado también las tenía e incluso eran más ostensibles. Presentaba una contusión en la nariz y una herida de unos 6 centímetros a la altura del abdomen, que señaló fue realizada por una de las dos mujeres con un arma blanca. Por ello, acá estamos ante una riña", apuntó el abogado.
Bajo ese escenario, el profesional remarcó que "faltan indicios para proceder a la detención de una sola persona, ya que todos tenían lesiones".
Más allá de estos argumentos, la magistrada Alejandra Varas declaró que la detención fue ajustada a derecho. Además, en la misma sesión judicial la fiscal (s) Katherine Fierro encausó al imputado por dos delitos de lesiones menos graves (contra la joven y su madre) y otro de amenazas, en perjuicio de su expareja. Los tres ilícitos en contexto de VIF.
Precautoria
La persecutora invocó la cautelar más gravosa contra el oriundo de Talcahuano, en la Región del Biobío, sosteniendo que su libertad constituye un peligro contra las víctimas y la sociedad. También arguyó que existe riesgo de fuga. Fundamentó esta postura en base al número de delitos formalizados y el abultado prontuario delictivo que posee el chorero.
Su oposición a esta precautoria manifestó el defensor, calificando esta medida solicitada por el Ministerio Público como desproporcionada.
"Independiente de ser tres delitos los que se investigarán, esto no son gravosos. Las lesiones pueden terminar con multas y las amenazas igual tienen baja penalidad", explicó Díaz, sumando que el encartado "tiene antecedentes penales por delitos contra la propiedad, pero nada por VIF".
Pese a estas alegaciones, la sentenciadora acogió la postura fiscal, ante lo cual dictó la prisión preventiva que está cumpliendo este imputado en la cárcel castreña, desde donde prestará declaración ante el ente persecutor para denunciar las lesiones que sufrió y sean indagadas.
56 años tiene la otra vecina que fue agredida en este confuso incidente.
80 días se dieron para investigar estos tres delitos en contexto de violencia intrafamiliar.