Castrilli dice que jueces castigados no deben volver a dirigir en Chile
"Es lo mismo que a un pedófilo se le ponga a custodiar un jardín de infantes", dijo, asegurando que Pablo Milad sabía que "se hace lo que quieren los árbitros".
N. L. G. - Medios Regionales
Javier Castrilli declaró el martes en la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados por la posible corrupción en el arbitraje nacional y en paralelo a eso el Tribunal de Disciplina de la ANFP liberó los castigos a los jueces involucrados en la polémica en torno al duelo de Promoción de Huachipato con Copiapó, donde los referís acusaron que hubo un "llamado de Santiago" para cobrar penal a favor de los acereros.
El dictamen absolvió a Francisco Gilabert, ya que sus audios fueron liberados sin su autorización por Felipe Jerez, quien fue castigado con 40 partidos sin dirigir. Cristian Droguett, a cargo del VAR (siglas en inglés del árbitro asistente de video) ese día, con 30 duelos de castigo, misma cantidad para Mario Vargas, el quality manager del VAR esa jornada.
Para Castrilli, ninguno de los tres debería volver a dirigir en el fútbol chileno. "¿A esas personas les van a volver a dar tamaña responsabilidad después de que terminen la sanción?, ¿ustedes creen que están preparados para garantizar el estado impermeable y trabajar interviniendo en los intereses de terceros? Debieron ser exonerados de por vida de la actividad. Me parece una cosa lamentable hablar de suspensión. Es lo mismo que un pedófilo cuando termine su sanción y pague su deuda con la justicia se le ponga a custodiar un jardín de infantes", lanzó duramente el argentino en radio Cooperativa.
El trasandino tampoco cree que valga la pena volver a su cargo de presidente de la Comisión de Árbitros de la ANFP tras todo lo ocurrido. "El daño que se me ha hecho es irreparable, a nosotros se nos ha ejecutado en una silla eléctrica para ver después que éramos inocentes", comentó, y reiteró que "aceptar mi separación del cargo era aceptar estas acusaciones absurdas".
Sobre el estado actual del arbitraje chileno con los 14 despedidos reintegrados después de su salida, Castrilli tuvo duros términos. "Esta organización de árbitros puso al fútbol chileno de rodillas, se hace lo que quieren los árbitros. Desde el presidente para abajo me dijeron que los árbitros hacen lo que quieren, son cosas de una gravedad mayúscula", cerró.