Basura: ser parte de la solución, no del problema
Incierto es el destino de los residuos domiciliarios de Chiloé. Una vez que la basura es recogida, su futuro se complejiza y día a día se buscan soluciones solo para salir del paso, con la amenaza latente que un día, definitivamente no pueda ser traslada, quedando almacenada en nuestros hogares o incluso en la calle, como ha pasado en Ancud.
Los antiguos vertederos de Chiloé están colapsados, con problemas graves que afectan la salud y el medioambiente. La solución es compleja, ya que construir un recinto con las condiciones para almacenar y tratar la basura lleva tiempo tiene un alto costo y, por si fuera poco, nadie quiere que se construya cerca de donde vive.
Es necesario dejar de lado los egoísmos. La solución debe ser con una mirada global, que permitan en el corto plazo buscar una respuesta provisoria a los problemas que nos plantea el manejo de los residuos domiciliarios y construir los cimientos para que a futuro se entregue una salida definitiva.
El Ejecutivo, especialmente la Seremi de Salud, debe articular esta verdadera cruzada, pero para ello es urgente dar claridad, dejando en el pasado las constantes rectificaciones que solo dejan más dudas que certezas. Así como mantener comunicación con todos los municipios, que permita que las determinaciones sean consensuadas. Por ejemplo, cuando se decretó Alerta Sanitaria ni los alcaldes conocían la forma en que iba a operar esta medida, los que no contribuyó en resolver la urgencia.
Es esencial que prontamente se pueda determinar donde se proyectará la solución definitiva a este problema, y para esto es fundamental que todos los municipios puedan llegar a acuerdos, dejando de lado los cálculos políticos que en el pasado fueron la tranca para avanzar en soluciones.