Joven vio rebajada la drástica pena que arriesgaba por ultraje a niñita de 3 años
Se exponía a 3,5 décadas de cárcel por agresiones en Quemchi, pero fallo lo favoreció.
En un 80 por ciento se vio rebajada la máxima pretensión punitiva contra un joven, quien había sido sindicado como responsable de sistemáticos ultrajes contra una pequeña de apenas 3 años, en la comuna de Quemchi. Fue acusado por abuso y violación reiterados, arriesgando 35 años de cárcel. Sin embargo, se acreditó su autoría en solo un episodio de tocaciones impropias.
Así quedó definido tras el juicio realizado ante el Tribunal Oral en lo Penal de Castro, donde se expusieron los antecedentes de este escabroso caso, que contó con las diligencias de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) de Ancud que se activaron a fines de julio del 2021, tras concurrir al Hospital San Carlos, donde fue trasladada la menor por estos hechos.
Desde entonces comenzaron las pericias que vincularon al sujeto de iniciales R. Ó. L. L. (36), quien enfrentó la reciente audiencia en prisión preventiva, a las supuestas agresiones perpetradas entre los años 2020 y 2021.
Evidencia
El fiscal Luis Barría presentó junto a los informes policiales y sexológicos, prueba testimonial y documental para sustentar la eventual reiteración de los dos delitos, como la autoría del encartado. Invocó penas de 7 y 12 años de presidio por el abuso y la violación, respectivamente.
Sin embargo, las querellantes solicitaron sanciones más gravosas por estos ilícitos. Por el programa Mi Abogado, la jurista Karen Gómez pidió 9 y 16 años por ambos cargos; mientras que el servicio Mejor Niñez, representado por la abogada Verónica González, requirió 15 y 20 años de reclusión.
Por su parte, el defensor particular Sergio Coronado apostó inicialmente por la absolución total de su cliente, planteando "la inocencia" del joven. Postuló la "inexistencia de los delitos por los cuales se acusó", remarcando que la prueba sería "contradictoria", como también "insuficiente" para establecer los cargos.
Tras el análisis de los antecedentes expuestos por los intervinientes, la sala presidida por la magistrada Loreto Yáñez resolvió absolver al enjuiciado por la violación y condenarlo por un acto de abuso, justamente el perpetrado a fines de julio y que motivó la develación del caso, activando la persecución penal.
De esta forma, los acusadores debieron rebajar ostensiblemente su pretensión, coincidiendo en invocar 7 años de presidio.
"Como Ministerio Público estimamos que en base a la prueba incorporada se logró un veredicto condenatorio por el abuso sexual. No obstante, no compartimos la decisión del tribunal por la absolución por el delito de violación", señaló el fiscal Barría.
Asimismo, el profesional explicó que se pidió dicho cuántum "por la extensión del mal causado en perjuicio de esta menor, esperando que la pena sea de cumplimento efectivo".
Igualmente, la fuente reconoció que tanto la indagatoria como el juicio "fueron complejos por las circunstancias de comisión y la edad de la menor", adelantando que esperará la lectura del fallo programada para el 23 de junio, para evaluar un recurso de nulidad.
Expectativa
Por su parte, Coronado valoró el dictamen, enfatizando que los acusadores tenían una alta expectativa punitiva. "Finalmente, el tribunal desestimó gran parte de los antecedentes presentados por la Fiscalía y querellantes", sostuvo, lo cual permitió desechar este gravoso escenario.
Bajo este contexto, el penalista solicitó una pena sustitutiva que no supere los 5 años de presidio, bajo la modalidad de cumplimiento de la libertad vigilada intensiva.