Pedro Bárcena González

Con presencia de más de medio millar de personas, la isla de Quinchao se unió para despedir ayer a las hermanas que fallecieron en un trágico incendio registrado el domingo anterior en el sector de Palqui, comuna de Curaco de Vélez. Tras ser velados en casa de familiares, los cuerpos llegaron a Achao para las ceremonias fúnebres.

Danitza y Victoria Guenchur Guidipani, de 21 y 11 años, respectivamente, perdieron la vida al incendiarse su hogar. Tras ser entregados sus restos por el Servicio Médico Legal (SML) de Ancud, luego de las pericias tanatológicas y de cotejo de ADN, fueron velados hasta la mañana de este domingo en casa de familiares, para luego ser remitidos al Liceo Bicentenario Insular de Achao, donde estudiaban.

Sus compañeros, de uniforme y sin poder disimular el dolor por la dramática pérdida de sus amigas, esperaron el arribo de los féretros para llevar a cabo una capilla ardiente durante el mediodía, en el establecimiento educacional (de básica). La comunidad ya se había volcado a las calles para despedirlas y darle apoyo a su familia.

Posteriormente, se realizó la misa fúnebre en la iglesia Patrimonio de la Humanidad Santa María de Loreto, que no dio abasto para los dolientes, muchos de los cuales esperaron afuera del templo achaíno para brindar el último adiós a las víctimas de este fatal siniestro.

Testimonios

Durante la ceremonia religiosa, familiares, amigos y compañeros de las hermanas entregaron dramáticos testimonios, que no solo dieron cuenta de la alegría y compañerismo que siempre mostraban ellas, sino que también refrendaron todo el cariño que sus seres queridos le brindaron en vida.

Tal como indicó el párroco de Achao, Carlos Cárdenas, quien encabezó el oficio, toda la comunidad insular "está conmovida por el dolor. Quinchao y Curaco de Vélez sienten esta terrible situación, es un tiempo difícil, pero se está cerrando un ciclo con este funeral".

Junto con destacar el legado que dejaron estas chicas en su comunidad, el religioso pidió a la comunidad "acompañar a toda la familia en este tiempo, tal como lo hemos visto hoy (ayer) con esta multitud que ha llegado".

Al término de la misa, todos los dolientes acompañaron en cortejo a las hermanas hasta el cementerio municipal, donde se les brindó la última despedida antes de ser sepultadas, en medio de desgarradoras muestras de pesar, ante su prematura partida.

De acuerdo a lo señalado por el alcalde de Quinchao, René Garcés (ind), quien participó activamente en todas las actividades fúnebres, la comunidad "siente una tristeza tremenda. Llegaron muchas personas, más de un centenar de la isla Linlín, puesto que la familia era oriunda de ese sector".

Igualmente, el jefe comunal refrendó que "todas las voluntades están centradas en la familia de las pequeñas", reiterando "que esta tragedia ha sido un golpe tremendo y esperamos que los papás sigan luchando".

Luto

Por su parte, la alcaldesa de Curaco de Vélez, Javiera Yáñez (pro PS), manifestó que las víctimas "fueron despedidas en un masivo funeral, muy triste... Nuestra comuna y nuestra isla de Quinchao, estamos de luto, han sido días bastante difíciles. Estamos haciendo todas las gestiones para acompañar a la familia, más allá que en este momento no existen palabras de consuelo".

Remarcó la abogada que "como municipios junto a Quinchao trabajaremos para acompañar a sus seres queridos en este proceso que es más difícil aún".

"Estamos haciendo las gestiones para acompañar a la familia, más allá que en este momento no existen palabras de consuelo".

Javiera Yáñez,, alcaldesa de Curaco de Vélez