Pedro Bárcena González

Con penas sustitutivas quedaron ayer los tres sujetos cuyas detenciones se habían ampliado por 48 horas, tras verse implicados en un atraco en un inmueble de Curaco de Vélez, en el que incluso una niña de 12 años fue engañada para posibilitar la concreción del ilícito.

Ante el Juzgado Mixto de Quinchao fueron puestos a disposición los imputados de iniciales S. A. Z. J. (29), Y. P. R. L. (27) y J. A. C. Á. (35), en una audiencia donde se expusieron por parte del fiscal (s) Cristian Mena los antecedentes del amplio procedimiento policial que permitió la aprehensión del grupo.

El dispositivo, como aclaró el mayor Gustavo Guajardo, jefe de la Segunda Comisaría de Carabineros de Castro, con jurisdicción en el área, se activó tras los datos aportados por la misma escolar, los cuales fueron denunciados por sus padres.

Como especificó el oficial, los tres amigos llegaron hasta el domicilio afectado "a bordo de un furgón y tras engañar a una menor de edad que estaba en el lugar, ingresaron y desde una bodega sustrajeron una bicicleta y diversas herramientas".

Según el comisario, con los datos de los denunciantes "se inició un amplio despliegue que incluyó el seguimiento -de los sospechosos- conforme a las características aportadas". Advirtió que los sujetos "intentaron darse a la fuga a través del canal Dalcahue, cruzando en barcaza".

No obstante, en la rampa de conectividad dalcahuina los encartados fueron detenidos por efectivos de la Tenencia local.

La aprehensión fue ajustada a derecho, como lo determinó el magistrado Hernán Mancilla, quien además otorgó los 2 días para el desarrollo de las pesquisas, tendientes a establecer la figura penal de los hechos, como la participación de los imputados.

Ya con todos los datos, el fiscal (s) Mena formalizó ayer al trío por el delito de hurto, en una sesión judicial donde ellos admitieron sus responsabilidad en el ataque delictivo, con el objeto de acceder a una pena rebajada, en especial porque no mantienen irreprochable conducta anterior.

Hurto

De esta forma, en un juicio simplificado todos fueron condenados por el sentenciador por el delito de hurto simple, por un valor entre las 4 y 40 UTM, a 61 días de presidio.

Tal como explicó el defensor Nelson Troncoso, dos de sus representados "fueron beneficiados con la prestación de servicios a la comunidad por 77 horas, mientras que el otro recibió la remisión condicional de la pena por el plazo de un año".