Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Deportes
  • Servicios
  • Clasificados
  • Estrellas

La Peña Folclórica Coche Molina retorna tras tres años a la presencialidad

Luego de una edición virtual el 2021 y no realizarse el año pasado, vuelve el tradicional encuentro que en esta versión 43 será durante cuatro noches.
E-mail Compartir

Carmen Luz Santis González

Desde hoy hasta el domingo el conjunto Magisterio de Castro tendrá en su parrilla a una variedad de artistas que pretenden encantar con el folclor de la zona y del país en el gimnasio de la Escuela Luis Uribe Díaz.

Se trata de la cuadragésima tercera versión de la Peña Folclórica Coche Molina "Qué Lindo es Castro", en la que más de 20 agrupaciones y solistas difundirán las tradicionales melodías de Chiloé y de otros lugares, acompañadas de comidas típicas desde las 21 horas de forma presencial, tras haber sido transmitida en redes sociales en 2021 y no realizada el año pasado.

Conjuntos de Quellón, Dalcahue, Puqueldón, Chonchi, Achao y Castro, más el grupo Manzanar como representante de la cueca de la zona centro sur, invitan a compartir esta vez la Coche Molina con un carácter colaborativo.

Así lo indicó la presidenta de Magisterio de Castro, Teresa Barría, quien comentó que "este año se redujo un día más; antes se hacía una semana, quedamos después con cinco días y, por un asunto de recursos, quedamos con cuatro ahora".

Aun así, la artista recalcó la importancia de "la generosidad de los grupos folclóricos y todo el empeño que está poniendo el grupo Magisterio, físico y económico que ha resultado como una minga", junto con rescatar el apoyo de amistades y familiares.

"Esta es una peña diferente. ¿Va a ser más emotiva? No sé, pero va a tener su significado", sintetizó la folclorista sobre este panorama que suele ser paralelo a la Feria de la Biodiversidad y el Festival Costumbrista Chilote.

Para esta ocasión la oferta musical chilota regresó con el respaldo de la Municipalidad de Castro y otros auspiciadores. Una versión que igualmente fue descrita como "fresquita", al considerar las menores temperaturas por la noche, por lo que se llama al público a acudir convenientemente abrigado.

Programa

Para esta jornada inaugural estarán Margarita Cárdenas de Dalcahue, además de los grupos Apahuén de Puqueldón, Raíces de Nalhuitad, Magisterio de Chonchi y los chicos de Quilalar de Quellón. El anfitrión se presentará mañana en el céntrico gimnasio de la capital provincial, donde las entradas se venderán a 2 mil pesos para adultos y mil para los niños.

En efecto, Magisterio de Castro cerrará el programa del viernes, noche en que también estarán Aucar de Quemchi, Sergio Colivoro de Chonchi y los conjuntos folclóricos de Apoderados del Colegio San Francisco y Huenteche de Achao. Al día siguiente, la parrilla sabatina abarca a Viento Sur, el grupo de acordeonistas del Colegio San Francisco, además de los grupos Tierra Dorada de Castro, San Miguel de Nercón, Senda Chilota de Castro y Micanpué de Quehui.

Para el domingo -y ya lunes de madrugada-, al cierre de la edición, la organización aún no informaba el detalle de los artistas en escena para la velada final a una de las principales peñas del Archipiélago.

La Peña Folclórica Coche Molina retorna tras tres años a la presencialidad

Luego de una edición virtual el 2021 y no realizarse el año pasado, vuelve el tradicional encuentro que en esta versión 43 será durante cuatro noches.
E-mail Compartir

Carmen Luz Santis González

Desde hoy hasta el domingo el conjunto Magisterio de Castro tendrá en su parrilla a una variedad de artistas que pretenden encantar con el folclor de la zona y del país en el gimnasio de la Escuela Luis Uribe Díaz.

Se trata de la cuadragésima tercera versión de la Peña Folclórica Coche Molina "Qué Lindo es Castro", en la que más de 20 agrupaciones y solistas difundirán las tradicionales melodías de Chiloé y de otros lugares, acompañadas de comidas típicas desde las 21 horas de forma presencial, tras haber sido transmitida en redes sociales en 2021 y no realizada el año pasado.

Conjuntos de Quellón, Dalcahue, Puqueldón, Chonchi, Achao y Castro, más el grupo Manzanar como representante de la cueca de la zona centro sur, invitan a compartir esta vez la Coche Molina con un carácter colaborativo.

Así lo indicó la presidenta de Magisterio de Castro, Teresa Barría, quien comentó que "este año se redujo un día más; antes se hacía una semana, quedamos después con cinco días y, por un asunto de recursos, quedamos con cuatro ahora".

Aun así, la artista recalcó la importancia de "la generosidad de los grupos folclóricos y todo el empeño que está poniendo el grupo Magisterio, físico y económico que ha resultado como una minga", junto con rescatar el apoyo de amistades y familiares.

"Esta es una peña diferente. ¿Va a ser más emotiva? No sé, pero va a tener su significado", sintetizó la folclorista sobre este panorama que suele ser paralelo a la Feria de la Biodiversidad y el Festival Costumbrista Chilote.

Para esta ocasión la oferta musical chilota regresó con el respaldo de la Municipalidad de Castro y otros auspiciadores. Una versión que igualmente fue descrita como "fresquita", al considerar las menores temperaturas por la noche, por lo que se llama al público a acudir convenientemente abrigado.

Programa

Para esta jornada inaugural estarán Margarita Cárdenas de Dalcahue, además de los grupos Apahuén de Puqueldón, Raíces de Nalhuitad, Magisterio de Chonchi y los chicos de Quilalar de Quellón. El anfitrión se presentará mañana en el céntrico gimnasio de la capital provincial, donde las entradas se venderán a 2 mil pesos para adultos y mil para los niños.

En efecto, Magisterio de Castro cerrará el programa del viernes, noche en que también estarán Aucar de Quemchi, Sergio Colivoro de Chonchi y los conjuntos folclóricos de Apoderados del Colegio San Francisco y Huenteche de Achao. Al día siguiente, la parrilla sabatina abarca a Viento Sur, el grupo de acordeonistas del Colegio San Francisco, además de los grupos Tierra Dorada de Castro, San Miguel de Nercón, Senda Chilota de Castro y Micanpué de Quehui.

Para el domingo -y ya lunes de madrugada-, al cierre de la edición, la organización aún no informaba el detalle de los artistas en escena para la velada final a una de las principales peñas del Archipiélago.

columna de opinión

E-mail Compartir

El desafío de proteger a las ballenas

La imagen de una ballena emergiendo libre en el mar de Tocopilla navegó sin cesar por las redes sociales hace algunos días. La presencia de megafauna, una vez más, deslumbró al hombre. Fue calificada como "impresionante" y "hermosa" por los medios, pero más allá de su majestuosidad poco sabemos sobre la importancia de la protección de estas especies.

Tras el reciente Día Mundial de las Ballenas, que se celebra cada 19 de febrero, resulta necesario recordar que los grandes cetáceos habitan en océanos repletos de peligro: contaminación acústica, enredos con redes, plásticos, colisiones y la caza en el mundo han mermado sus poblaciones. En Chile su categoría de conservación oscila de "vulnerable" a "en peligro crítico de extinción", según el Ministerio de Medio Ambiente.

Se trata de especies que entregan beneficios ambientales: capturan carbono -en promedio una ballena azul secuestra 33 toneladas de CO2-, estabilizan los ecosistemas y aumentan la producción de los stocks pesqueros.

A la par de su importancia, los esfuerzos del país por protegerlas han sido encomiables: en 2008 se estableció una prohibición permanente de captura en aguas nacionales, fueron declaradas Monumento Natural y en 2011 se promulgó el reglamento general de protección a los cetáceos. En 2019, Fundación MERI y la Gobernación Marítima de Castro se aliaron para elaborar la primera normativa del país orientada a regular la navegación en la Patagonia norte, demostrando que los privados pueden generar iniciativas en pro de la conservación.

La Fundación MERI, que promueve la investigación científica y la educación ambiental para la mitigación del cambio climático generando planes de conservación en distintos territorios, lanzó la sexta versión de la campaña estival "Ballena a la vista", la que tiene como objetivo sensibilizar, reducir las amenazas y recordar a la comunidad que se deben respetar las distancias de seguridad en los avistamientos. También está disponible una "Guía didáctica de cetáceos", diseñada para que todos puedan conocer sus características biológicas, historia y hábitats en las costas chilenas.

La fundación y el Ministerio de Medio Ambiente lanzaron The Blue BOAT Initiative, que contempló la instalación de la primera boya inteligente en el mar del golfo de Corcovado, en 2022, un verdadero "oído" que capta los sonidos bajo el mar. El sistema permite detectar la presencia de cetáceos y así dar a aviso a la Armada para alertar a los barcos con el fin de evitar colisiones, un riesgo para las ballenas.

generar evidencia

Al mismo tiempo, se están recolectando datos de variables oceanográficas con el objetivo de monitorear las actividades humanas en las áreas marinas protegidas a través tecnología que permite generar evidencia científica que ayuda a la toma de decisiones para la conservación de la biodiversidad en el marco del compromiso mundial 30/30.

Los esfuerzos que hacen la ciencia y las organizaciones públicas y privadas no deben cesar para que todos tengamos la oportunidad de conocer y disfrutar de la belleza de las ballenas en los océanos.

"Tras el reciente Día Mundial de las Ballenas, que se celebra cada 19 de febrero, resulta necesario recordar que los grandes cetáceos habitan en océanos repletos de peligro: contaminación acústica, enredos con redes, plásticos, colisiones y la caza en el mundo han mermado sus poblaciones. En Chile su categoría de conservación oscila de "vulnerable" a "en peligro crítico de extinción", según el Ministerio de Medio Ambiente. Se trata de especies que entregan beneficios ambientales: capturan carbono, estabilizan los ecosistemas y aumentan la producción de los stocks pesqueros".

Sonia Español-Jiménez,, directora ejecutiva de la Fundación MERI y doctora en Biología Marina

columna de opinión

E-mail Compartir

El desafío de proteger a las ballenas

La imagen de una ballena emergiendo libre en el mar de Tocopilla navegó sin cesar por las redes sociales hace algunos días. La presencia de megafauna, una vez más, deslumbró al hombre. Fue calificada como "impresionante" y "hermosa" por los medios, pero más allá de su majestuosidad poco sabemos sobre la importancia de la protección de estas especies.

Tras el reciente Día Mundial de las Ballenas, que se celebra cada 19 de febrero, resulta necesario recordar que los grandes cetáceos habitan en océanos repletos de peligro: contaminación acústica, enredos con redes, plásticos, colisiones y la caza en el mundo han mermado sus poblaciones. En Chile su categoría de conservación oscila de "vulnerable" a "en peligro crítico de extinción", según el Ministerio de Medio Ambiente.

Se trata de especies que entregan beneficios ambientales: capturan carbono -en promedio una ballena azul secuestra 33 toneladas de CO2-, estabilizan los ecosistemas y aumentan la producción de los stocks pesqueros.

A la par de su importancia, los esfuerzos del país por protegerlas han sido encomiables: en 2008 se estableció una prohibición permanente de captura en aguas nacionales, fueron declaradas Monumento Natural y en 2011 se promulgó el reglamento general de protección a los cetáceos. En 2019, Fundación MERI y la Gobernación Marítima de Castro se aliaron para elaborar la primera normativa del país orientada a regular la navegación en la Patagonia norte, demostrando que los privados pueden generar iniciativas en pro de la conservación.

La Fundación MERI, que promueve la investigación científica y la educación ambiental para la mitigación del cambio climático generando planes de conservación en distintos territorios, lanzó la sexta versión de la campaña estival "Ballena a la vista", la que tiene como objetivo sensibilizar, reducir las amenazas y recordar a la comunidad que se deben respetar las distancias de seguridad en los avistamientos. También está disponible una "Guía didáctica de cetáceos", diseñada para que todos puedan conocer sus características biológicas, historia y hábitats en las costas chilenas.

La fundación y el Ministerio de Medio Ambiente lanzaron The Blue BOAT Initiative, que contempló la instalación de la primera boya inteligente en el mar del golfo de Corcovado, en 2022, un verdadero "oído" que capta los sonidos bajo el mar. El sistema permite detectar la presencia de cetáceos y así dar a aviso a la Armada para alertar a los barcos con el fin de evitar colisiones, un riesgo para las ballenas.

generar evidencia

Al mismo tiempo, se están recolectando datos de variables oceanográficas con el objetivo de monitorear las actividades humanas en las áreas marinas protegidas a través tecnología que permite generar evidencia científica que ayuda a la toma de decisiones para la conservación de la biodiversidad en el marco del compromiso mundial 30/30.

Los esfuerzos que hacen la ciencia y las organizaciones públicas y privadas no deben cesar para que todos tengamos la oportunidad de conocer y disfrutar de la belleza de las ballenas en los océanos.

"Tras el reciente Día Mundial de las Ballenas, que se celebra cada 19 de febrero, resulta necesario recordar que los grandes cetáceos habitan en océanos repletos de peligro: contaminación acústica, enredos con redes, plásticos, colisiones y la caza en el mundo han mermado sus poblaciones. En Chile su categoría de conservación oscila de "vulnerable" a "en peligro crítico de extinción", según el Ministerio de Medio Ambiente. Se trata de especies que entregan beneficios ambientales: capturan carbono, estabilizan los ecosistemas y aumentan la producción de los stocks pesqueros".

Sonia Español-Jiménez,, directora ejecutiva de la Fundación MERI y doctora en Biología Marina