Salud mental y la decisión de
La orientación vocacional resulta un recurso previo valioso para afrontar adecuadamente la decisión de ingresar a educación superior, pues proporciona claridad y estructura a los jóvenes ante la complejidad de escoger un programa de estudios
Este martes 10 de octubre se conmemoró el Día Mundial de la Salud Mental, una fecha que busca crear conciencia a nivel mundial sobre la salud mental y visibilizar sus problemáticas, este año bajo el lema "La Salud Mental es un Derecho Humano Universal". En relación con esta premisa y a propósito de esta campaña, es importante reflexionar sobre el desafío que conlleva para los adolescentes y sus familias afrontar el término de la educación media y la posibilidad de ingresar a la educación superior, pues la incertidumbre y la toma de decisiones se presentan como factores estresantes que pudiesen afectar negativamente a los adolescentes.
Respecto de lo anterior, diversos estudios realizados por el Ministerio de Salud en Chile entregan cifras alarmantes respecto de la prevalencia de los trastornos mentales en la población, siendo la ansiedad y la depresión las que se presentan con mayor frecuencia, alcanzando un 38% entre niños, niñas y adolescente, cifra que pudiese incrementarse con el proceso de transición al finalizar la educación media, por ello, es fundamental abordar este proceso de forma cuidadosa.
¿CÓMO ABORDAR
SALUDABLEMENTE EL
PROCESO DE INGRESO A
EDUCACIÓN SUPERIOR?
AUTOCONOCIMIENTO
Y ORIENTACIÓN VOCACIONAL
En este proceso, la orientación vocacional resulta un recurso previo valioso para afrontar adecuadamente la decisión de ingresar a educación superior, pues proporciona claridad y estructura a los jóvenes ante la complejidad de escoger un programa de estudios. En este sentido los procesos de orientación vocacional permiten a las y los jóvenes profundizar en el autoconocimiento, lo que resulta una herramienta fundamental para lograr ajustar sus habilidades personales, con sus aspiraciones personales y sus talentos, ayudando a reducir de forma significativa el estrés asociado a elegir un programa académico que cumpla con aquello o inclusive, si deciden no hacerlo.
Respecto de lo anterior, el desarrollo de un proyecto de vida permite a las y los adolescentes trazar una ruta que promueve la toma de decisiones informadas respecto de su futuro, equilibrando aquello que quieren con sus habilidades. Asimismo, diversas investigaciones refieren que, al trabajar en sus proyectos de vida, los adolescentes favorecen sus procesos afectivos e intelectuales, desarrollando confianza en sí mismos para la toma de decisiones y para afrontar el desafío de ingresar a la educación superior, contribuyendo con ello a su bienestar emocional.
INFORMACIÓN COMO
HERRAMIENTA FACILITADORA
Resulta fundamental acceder información confiable y detallada cuando se decide ingresar a educación superior, pues Chile presenta una gran y diversa oferta académica, con más de 10 mil carreras distribuidas en Centros de Formación Técnica (CFT), Institutos Profesionales (IP) y Universidades. En este sentido, la elección de uno de los programas de estudios y de una institución resultan de las más significativas una vez finalizado el proceso de educación media, y aunque emocionante, también puede ser abrumador dada la cantidad de opciones disponibles.
Informarse permite tener claridad sobre los posibles caminos que se pueden transitar y cuál de ellos se ajusta más al futuro académico y profesional que se proyecta, siendo un facilitador al momento de decidir, por ello, se sugiere indagar en los siguientes aspectos: explorar detalladamente el programa de estudios de interés y analizar sus diferencias entre distintas instituciones, verificar si se encuentra adscrita a gratuidad, investigar las oportunidades que ofrece (becas internas, certificaciones, pasantías, entre otras) y comparar sus tasas de empleabilidad y de los ingresos económicos percibidos una vez egresados de dicha casa de estudios.
Asimismo, resulta relevante considerar los años de acreditación de las instituciones de educación superior, ya que, en Chile existen 178 instituciones, de las cuales 81 están acreditadas. Conocer dicha información permite verificar la calidad de sus procesos, promoviendo la confianza al momento de elegir. Para facilitar tu búsqueda puedes ingresar al portal www.mifuturo.cl
En relación con lo anterior, también es fundamental indagar en los procesos de admisión de las distintas instituciones, pues cada una de ellas establece sus requisitos y documentación necesaria para matricularse, por ejemplo, hay instituciones que no solicitan rendir la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES), otras sólo piden rendirla (sin importar el puntaje) y en algunas de ellas se debe cumplir con un puntaje en específico para postular. Asimismo, es importante considerar la calendarización de los distintos procesos de admisión.
En este sentido, la educación superior Técnico Profesional inició su proceso de admisión 2024 el día de ayer, ofreciendo programas de estudio más cortos, flexibilidad para compatibilizar trabajo y estudios en sus distintas jornadas y la posibilidad de convalidar asignaturas si egresaste de la enseñanza media Técnico Profesional o por tu experiencia laboral previa.
El autoconocimiento y el acceso estructurado a la información durante el proceso de ingreso a educación superior es esencial para proteger la salud mental de las y los adolescentes, pues además de aliviar la toma de decisiones y el estrés, permite a los jóvenes trabajar en su seguridad para afrontar los desafíos del mundo profesional con determinación y confianza. En última instancia, ingresar a la educación superior no solo representa un hito académico, sino que también resulta un viaje emocional y personal altamente significativo.