Desde el calzado a su hidratación, siga estos consejos para evitar que los pies sufran con el verano
Las altas temperaturas pueden traer consecuencias negativas para los pies a nivel dermatológico y traumatológico. Dos especialistas explican los efectos y entregan sus recomendaciones para no sufrir durante la temporada estival.
Ignacio Silva
Al pensar en una ola de calor como la que en los últimos días ha afectado a cuatro regiones de Chile, la mayor parte de las personas tiende a pensar en factores como la hidratación y la protección de la piel.
Muchos menos son los que consideran los cuidados que se deben tener con los pies, extremidades que generalmente se ven particularmente afectadas cuando el calor sobrepasa los 30 grados.
"Las altas temperaturas pueden causar lesiones que pueden ir desde leves a graves, dentro de las cuales encontramos heridas, presencia de ampollas, presencia de quemaduras. También es importante destacar que el aumento de temperaturas al interior de un calzado cerrado aumenta la sudoración de los pies y los hace mucho más propensos a la presencia de hongos", explica Pamela Valdebenito, académica de la Facultad de Medicina de la Universidad Central.
La especialista sostiene que el uso de un calzado adecuado para la temporada es fundamental para prevenir estas posibles consecuencias, pues permiten mantener los pies frescos y bien ventilados.
"Además es importante que sean cómodos al caminar. Con esto estamos disminuyendo el edema o inflamación de los pies y previniendo la formación de heridas por roce o fricción", remarca.
Entonces, ¿cuál es el calzado ideal? Según Valdebenito lo óptimo es utilizar sandalias, aunque también puede permitirse el uso de zapatillas de materiales que favorezcan el intercambio de temperaturas en su interior.
"Las recomendaciones parten por escoger un calzado que esté confeccionado con materiales naturales como cuero, algodón y lona, que se adapten muy bien a nuestros pies, que permitan la flexibilidad y movimiento, que permitan la transpiración del pie. Pero lo más importante de todo es mantener la higiene de nuestros pies", profundiza la docente.
"Lo recomendable es mantener un lavado por lo menos dos veces al día con un jabón neutro, un secado por tocaciones y revisar nuestros pies diariamente en la búsqueda de una lesión que podamos prevenir oportunamente. Para ello, es importante hacer una valoración al final del día de cómo está el estado de nuestros pies, permitir un descanso oportuno y una vez que uno los ha lavado y secado adecuadamente, se debe mantener los pies bien hidratados con una crema o emulsión", añade.
Malla
Un cuidado efectivo de los pies no sólo involucra mantenerlos frescos, sino también cómodos.
Así lo hace ver el doctor Cristián Ortiz, traumatólogo del centro de tobillo y pie de la Clínica Universidad de los Andes, quien explica su punto de vista poniendo como ejemplo una actividad típica de las vacaciones: una caminata.
"En esta época mucha gente vacaciona y hace caminatas y otros deportes. Por lo tanto, no hay que olvidarse de que si bien una sandalia o una hawaiana es buena para caminatas cortas, cuando hay un paseo o una caminata larga es mejor ponerse algún tipo de zapatillas de malla como las de trote o caminata", precisa.
Según el especialista, este tipo de calzado no sólo ayuda por su comodidad, sino también por su materialidad.
"Son amortiguadas, acolchadas y pueden tener malla que son expansibles y toleran bien los cambios de volumen por la hinchazón y los cambios de temperatura. Esto es importante si pensamos que uno de los principales problemas que aquejan a los pies con las altas temperaturas son la hinchazón y la sudoración excesiva, y eso puede hacer que el zapato se comprima, se sienta incómodo, genere roces, irritaciones y alergias que nos evitamos con estas zapatillas".
Por otro lado, Ortiz manifiesta que si en el período de calor extremo se va a realizar una actividad física más intensa es recomendable usar calcetines que protejan del roce en la zona. "Es ideal además si estos cuentan con protección UV, como algunos que se pueden encontrar en el mercado", complementa.
"Lo recomendable es mantener un lavado (de los pies) por lo menos dos veces al día con un jabón neutro".
Pamela Valdebenito,, académica U. Central
"Cuando hay una caminata larga es mejor ponerse algún tipo de zapatilla de malla como las de trote".
Cristián Ortiz,, traumatólogo U. Andes