Operario va a prisión por degollar a su abuela y hermano en la isla Caguach
Sujeto ayer fue formalizado por homicidio calificado y parricidio.
Con la exposición de macabros detalles del ataque armado, durante la jornada de ayer fue formalizado el confeso autor de un doble asesinato en la isla Caguach, comuna de Quinchao. El sujeto degolló a su hermano y su abuela, acusando "odio y resentimiento" hacia las víctimas. Quedó privado de libertad en la cárcel de Puerto Montt.
En el Juzgado Mixto de Achao se llevó a cabo la audiencia por este caso que se remonta a la noche del domingo pasado, cuando el imputado de iniciales F. D. M. V. (25) ultimó al interior de una casa emplazada en el sector Bellavista de la ínsula a sus parientes.
Por 3 días se había ampliado la detención del técnico acuícola, en espera de los informes de la Agrupación de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Chiloé y del Servicio Médico Legal (SML). Ya con las conclusiones periciales, el fiscal Javier Calisto expuso la dinámica criminal y los cargos penales asociados.
Como indicó en la sesión judicial el persecutor, el encartado utilizando un arma blanca persiguió al interior de la vivienda a su hermano, individualizado como P. F. M. V. (34). Tras propinarle una estocada en la espalda, la víctima cayó al suelo. "Intentó defenderse con las manos", expresó el abogado, agregando que en una verdadera ráfaga el agresor le asestó "4 heridas cortantes en el cuello".
Pero esta sangrienta acción no se detuvo ahí. Con el isleño vencido y con escasos signos vitales, el oriundo de Castro "lo agredió en el tórax, pecho y abdomen, provocándole al menos 12 lesiones", detalló el jurista. El joven falleció desangrado.
Igualmente, el representante del Ministerio Público describió que el ataque contra la dueña de casa, identificada como R. A. G. G. (75) se produjo en su dormitorio. Recalcó que su nieto, sabiendo que la adulta mayor tenía movilidad reducida y que no se podía defender, "le propinó una herida cortante cervical". La anciana igual murió por un shock hipovolémico.
Precautoria
Bajo esta dinámica, el fiscal encausó una indagatoria contra el operario por homicidio calificado en perjuicio de su hermano, con la circunstancia del ensañamiento, y por parricidio con relación a la otra víctima.
Considerando la gravosidad de los delitos formalizados, la forma de comisión y las penas probables a imponer -en abstracto los delitos se sancionan hasta con presidio perpetuo y perpetuo calificado, respectivamente-, Calisto invocó la prisión preventiva contra el isleño, aduciendo que su libertad constituye un peligro para la sociedad.
Para sustentar la existencia de ambos tipos penales como la participación del sujeto en los mismos y la necesidad de cautela, la fuente presentó los datos emanados del informe policial, que incluyó la detención en flagrancia. También sumó la declaración de una sobrina de la adulta mayor, quien situó en la casa al imputado junto a las víctimas, como la causa de muerte establecida tras las autopsias.
El testimonio del castreño igual fue incluido para acreditar los presupuestos materiales que fundamenten la precautoria más gravosa. Como reprodujo el jurista, en su confesión el implicado señaló que actuó bajo "una situación de odio con mi hermano" y de resentimiento hacia su abuela: "La culpa de la muerte de su abuelo".
Incluso, dando mayor severidad al actuar doloso del encartado, la fuente remarcó que se establecería el concurso de dos agravantes. El parentesco en el caso del homicidio y la alevosía por el parricidio, acotando por esta última que "actuó sobre seguro", ya que la mujer no podía moverse ni defenderse.
En tanto, el defensor Nelson Troncoso cuestionó la imposición de la cautelar más grave. Invocó el arresto domiciliario total.
Por un lado, el profesional discrepó sobre la existencia de la calificante del crimen del joven. "El ensañamiento no procede, ya que mi representado actúa en una sola acción. No está comprobado que buscó aumentar el dolor o el mal en la víctima", precisó, insistiendo en que los hechos se enfocan en un homicidio simple.
Bajo esta misma argumentación, se opuso a la agravante en el parricidio. "No se presentó evidencia para acreditar que el imputado actuó sobre seguro ante su abuela, que se aprovechó de su movilidad reducida", dijo el jurista, descartando también la existencia del agravante del parentesco por el homicidio.
Asimismo, para sustentar el concurso de una privación de libertad en el domicilio, el abogado resaltó que ya, a esta altura de la causa, se vislumbran con claridad 3 atenuantes de responsabilidad.
"Mi representado se denunció y confesó el delito, no dándose a la fuga teniendo la opción para ello, lo cual queda demostrado con el llamado que realizó a Carabineros, lo cual activó el procedimiento; además se da la colaboración sustancial, puesto que junto con reconocer su intervención, voluntariamente autoriza la fijación fotográfica, la toma de muestras biológicas y entrega la ubicación del arma, y también existe la irreprochable conducta anterior", detalló.
Dentro de este contexto, Troncoso comentó que con estas aminorantes, la pena podría bajar en tres grados, "siendo muy inferior a lo que en abstracto apuntó el fiscal", indicó.
Dictamen
Pese a estas alegaciones, el magistrado Hernán Mancilla acogió la prisión preventiva, no dudando en señalar que este "hecho impactó por su gravedad, lo que nos pone ante la idea que el imputado es peligroso para la sociedad".
Es más, en su deliberación, el juez expuso que se trató de "dos homicidios terribles", cuyas características "nunca se habían visto" en su jurisdicción. Junto con agregar que igual existiría riesgo de fuga por las penas que arriesga el encartado, sostuvo que el crimen "habla por sí solo; no estaríamos protegiendo a la comunidad si dejamos libre al imputado, ello alteraría la paz social".