Ofrecían güiña como gato doméstico: en Chiloé Silvestre sellará su rehabilitación
Persona que halló el ejemplar en la capital regional lo puso en adopción por redes sociales. Hoy se encuentra en el Cerefas de la Universidad San Sebastián, que ya prepara el traslado a Ancud.
Hasta el Centro de Conservación y Rehabilitación de la ONG Chiloé Silvestre, ubicado en el sector rural de Nal, península de Lacuy en Ancud, será trasladada la pequeña gata conocida como güiña (Leopardus guigna), encontrada por una persona en las cercanías del parque La Paloma de Puerto Montt.
De acuerdo a la información preliminar, se presume que el animal salvaje era perseguido por perros, por lo que el vecino que lo encontró no dudó en llevarlo a su domicilio.
Una de las curiosidades de esta historia, es que pese al carácter salvaje del felino, este sujeto pensó que era un gato doméstico, ofreciéndolo en adopción a través de Facebook y, en el intertanto, acudió a una clínica veterinaria para entregarlo "con sus vacunas al día", según cuentan profesionales que ahora están a cargo del animal.
Dentro de ellos, se encuentra Cinthya Bustamante, titular del Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre (Cerefas) de la Universidad San Sebastián sede Puerto Montt, donde se encuentra actualmente el ejemplar tras ser remitido por un equipo del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
La doctora remarcó que "al realizar el examen clínico de la paciente, no había ningún daño externo, tomamos radiografías para ver si había daños en huesos, tampoco encontramos ningún hallazgo radiológico, así que permanecerá unos días con nosotros. Es un ejemplar juvenil en sus meses primarios y todavía debe aprender a cazar, para subsistir en la naturaleza". Para asegurar su condición salvaje contactaron al equipo de Chiloé Silvestre.
A la espera de su arribo en Chiloé, los profesionales de esta organización insular, se refirieron a este peculiar caso. Así lo relató Javier Cabello, médico veterinario y director de la entidad, remarcando que "esa güiñita llegaría esta semana a Chiloé Silvestre, se está esperando que se coordine con el SAG Puerto Montt y SAG Ancud para el traslado".
"Nosotros tenemos un recinto especial para ellos, que construimos hace poco con ayuda económica de la Fundación Con Garra", remarcó el profesional. Sumó que "ahí tuvimos una hace poco, se liberó hace 10 días, después de un proceso de 5 meses. La güiña liberada llegó en estas mismas condiciones y con buen resultado; por eso la coordinación para que llegue a Chiloé Silvestre y pueda tener el mismo destino".
Bajo esta premisa, Cabello fue enfático al manifestar, que tal como ocurre con la mayoría de los ejemplares que llegan a la institución, el destino de esta felina debe ser su hábitat natural. "Ojo que la güiña una vez rehabilitada, tiene que ser liberada en el continente pues las poblaciones insulares son diferentes genéticamente", puntualizó.
La también médico veterinario de la institución, Javiera López, enfatizó en el trabajo práctico que se está desarrollando con el animal.
"Estamos esperando una cachorra de gato güiña; en este caso como Chiloé Silvestre vamos a prestar el espacio para que concluya su proceso de rehabilitación, estos tres a cuatro meses que le deben quedar aquí todavía en cautiverio, para asegurar su sobrevida una vez que se libere", explicó la fuente.
"La idea de esto es que sea más allá de los seis, siete meses, donde ya tiene su dentadura completa y va a tener las habilidades y esperemos las conductas naturales para cazar, trepar, encontrar refugio, entre otras cosas", añadió.
Adicionó la experta que "así que estamos a la espera en este momento que el Servicio Agrícola y Ganadero haga retiro de este ejemplar en la Universidad San Sebastián, donde hay colegas que ya han hecho atención primaria, le han hecho exámenes clínicos, exámenes de sangre entre otras cosas ".
Recomendaciones
¿Cómo saber que es una güiña y no un gato doméstico? Al toparse con un ejemplar del también conocido como gato chileno en estado salvaje, se puede generar confusión respecto a que se trate de un gato doméstico, pero existen elementos diferenciadores que pueden permitir evitar un ataque.
Esta especie es considerada la más pequeña de América, mide entre 39 a 48 centímetros de largo, más 20 a 25 centímetros de cola y su peso ronda los 2 a 3 kilogramos. Posee una cara pequeña, ojos grandes, redondos y pardos, nariz oscura, orejas de hurón, labios blancos y una cola espesa.
A su vez, la doctora Bustamante del Cerefas, dijo que su comportamiento es solitario y esquivo, siendo muy ágil y excelente trepador; al sentirse amenazado responde con agresividad, por lo que es importante tener precaución al detectar este tipo de comportamientos.
Concluyó indicando que si se halla uno de estos animales y está en peligro, "se debe llamar inmediatamente al SAG, que es la entidad fiscalizadora, en este caso de fauna silvestre en tierra".
"Vamos a prestar el espacio para que concluya su rehabilitación, estos 3 a 4 meses que le deben quedar en cautiverio"
Javiera López, veterinaria de Chiloé Silvestre.