Certifican como perro portuario a mascota de terminal castreño
"Rolo" es un can que llegó hace más de dos años al recinto de la costanera y fue adoptado por los trabajadores. Ahora cuenta con la credencial roja y es conocido internacionalmente por los turistas que llegan en los cruceros.
"Rolo El Grande", se transformó en el primer perro con credencial portuaria en el país, según Empormontt. De su cuello cuelga la credencial roja que lo acredita como funcionario del puerto de Castro y una de sus funciones es recibir a los turistas que llegan a la zona en los cruceros.
Cerca de tres años tiene Rolo, can que lleva cerca de dos años y medio en el terminal portuario de la capital chilota. Su nombre es una abreviatura de "roll on-roll off", que son los grandes buques que generalmente transportan vehículos.
Cuando solo tenía unos seis meses, el cachorro decidió seguir a un funcionario del puerto desde las cercanías de la plaza hasta el terminal ubicado en la costanera. Tras ello, los trabajadores iniciaron una campaña en redes sociales para intentar dar con sus dueños, pero sin resultados positivos, por lo que finalmente decidieron adoptarlo.
Paulo Barrientos, jefe del puerto de Castro, explicó que "asumimos todas las responsabilidades que significa la tenencia y el cuidado de mascotas, no fue una decisión fácil determinar que se quedara con nosotros. Tenía seis meses y lo primero que hicimos fue llevarlo a la veterinaria municipal, se le pusieron sus vacunas, se chipeó y tiene su carnet de perrito sano".
Con el correr del tiempo, Rolo no solo se ganó el cariño de los funcionarios del puerto, sino que también de los estibadores y de todos quienes circulan por el recinto e, incluso, aprendió su funcionamiento.
"Recibe a los cruceros, se convirtió en un actor principal para la recepción, no hay crucero que se pierda y todo el mundo se saca fotos, es conocido internacionalmente; entonces conversando con la Armada nace la iniciativa de reconocer a Rolo como un perrito portuario", afirmó el ejecutivo.
Además, Barrientos expuso que "los trabajadores portuarios se acreditan en un curso de capacitación donde obtienen el carnet de trabajador portuario, que es el 'carnet rojo', como históricamente se le llama; entonces buscándole un grado a Rolo y haciendo que él forme parte del equipo de trabajo, en este acto que se hizo, en esta ceremonia se le entrega su credencial por parte de la Armada y se declara como el primer perro portuario, con su acreditación y certificación correspondiente".
De acuerdo a lo manifestado por el encargado, ellos no tienen antecedentes de la existencia de otro perro con este tipo de acreditación en el país, pese a que general en los embarcaderos suelen circular este tipo de animales.
Gesto
En este sentido, relató que "lo que hace Empormontt (Empresa Portuaria de Puerto Montt) es un gesto de cuando existe el compromiso, el cariño, el amor por las mascotas; sí las empresas pueden hacerse responsable y hacer lo que nosotros hicimos con Rolito".
Siete son los funcionarios de Empormontt que se comprometieron al cuidado de la mascota en el puerto de Castro, pero quienes trabajan en las empresas de estiba también contribuyen en el resguardo del perro.
"De primera no fue fácil, nos costó que Rolito se adaptara, pero él se quedó en el puerto y lo reconoce como su hogar y eso está basado en el cariño que nosotros le damos", mencionó la misma fuente.
Personal de la Armada, del puerto de Castro y dirigentes de la organización Humanada Animal formaron parte de la ceremonia en la que Rolo recibió su certificación portuaria.
Ana Barrientos, presidenta de la entidad animalista, señaló que "para nosotros es súper lindo, porque Rolo andaba abandonado en la calle y ellos lo acogieron; entonces es muy importante para ellos, lo tienen como parte de la familia, súper regalón, con todos sus cuidados, cuando se pierde lo salen a buscar".
La dirigenta sumó que espera que acciones como esta sirvan de ejemplo a otras personas o empresas sobre el cuidado de los animales.
"Buscándole un grado para que forme parte del equipo de trabajo, se le entregó su credencial".
Paulo Barrientos,, jefe del puerto de Castro.
6 meses tenía el cachorro cuando siguió a uno de los trabajadores del puerto.