Matías Gatica Lindsay

El subsecretario del Interior, Luis Cordero, se refirió a la invitación a declarar que la Fiscalía le hizo al Presidente Gabriel Boric en el marco de la investigación por la compra fallida de la casa del expresidente Salvador Allende.

El jueves se dio a conocer que la Fiscalía invitó a declarar al Presidente Boric en calidad de imputado en la causa en que se investiga su responsabilidad en la compra fallida de este inmueble, esto luego de una querella interpuesta en su contra por la Fundación Fuerza Ciudadana.

Sobre ello ayer el fiscal a cargo del caso, Patricio Cooper, dijo a radio Duna que lo que se hizo fue una invitación y no una citación debido a que "hay ciertas personas revestidas de autoridad (...) que no se les puede citar durante la fase de investigación, sino que solamente por un tribunal de la garantía, pero se les hace una invitación".

"Esa persona indica en la invitación fecha y hora para prestar declaración que puede no ser en dependencia del Ministerio Público, sino que en su domicilio o su lugar de trabajo", aclaró el persecutor, quien añadió que el jefe de Estado "va a declarar en calidad de imputado porque está querellado", aunque "no está obligado a responder porque tiene derecho a guardar silencio". Agregó que el mandatario sí "va a declarar y prestar la cooperación".

El subsecretario Luis Cordero señaló ayer que "al Presidente comparecer, prestar testimonio tantas veces lo requieran los tribunales y el Ministerio Público, no le incomoda. Lo que yo llamo la atención (...) es las razones por las cuales al Presidente se le cita. Y una de las razones es porque hay personas que están dedicadas a presentar querellas indiscriminadas contra autoridades".

A su juicio, "hay un grupo de personas que ha decidido utilizar el sistema penal como herramienta política, con la interposición de querellas que creo que están generando una distorsión en el sistema de enjuiciamiento criminal muy severa (...) Esto es muy complejo (...) A mí me parece que cuando eso además implica desafiar a la principal autoridad del país, es preocupante para el funcionamiento del sistema democrático".

La PDI detuvo en la noche del jueves a uno de los presuntos involucrados en el secuestro de una madre y su hija de 7 años desde su vivienda en Conchalí.

Cerca de las 16:00 horas del jueves, cuatro sujetos llegaron en dos vehículos hasta una casa ubicada en calle Rapel, donde secuestraron a la mujer. Luego, una hora después, volvieron al domicilio y raptaron a la menor. El padre de ella intentó evitar el ilícito y fue herido por los antisociales.

Las víctimas fueron llevadas a una casa de cautiverio en Estación Central, donde horas más tarde fueron liberadas en buenas condiciones de salud y denunciaron lo ocurrido.

La PDI inició una investigación y en la noche del jueves dio con uno de los vehículos involucrados en el doble secuestro, el cual era concucido por uno de los presunto involucrados en el ilícito, quien fue detenido tras una persecución policial.

En el operativo fue detenida otra persona, que no estaría vinculada al rapto.

El jefe de la BIPE Antisecuestros de la PDI, Hassel Barrientos, dijo que los mismos captores habían secuestrado al padre de la niña el día anterior, y que luego que éste escapara de su cautiverio acudieron a su domicilio para secuestrar a su familia.

En cuanto a las motivaciones del secuestro, el fical Francisco Lanas dijo que aún no estaba claro, pero que no se descartaba que tuviera relación con el crimen organizado.

Una mujer de nacionalidad venezolana confesó que asesinó a puñaladas a su conviviente, con quien habría tenido una discusión que derivó en un episodio de violencia intrafamiliar en Quinta Normal.

Cerca de las 5:30 horas de ayer, la mujer de 54 años llegó a la 22° Comisaría de Quinta Normal, donde confesó que le había provocado lesiones con un arma cortopunzante a su conviviente, un chileno de 53 años.

Los carabineros se trasladaron hasta ese domicilio, ubicado en calle Santo Domingo, donde encontraron a la víctima sin signos vitales tras haber sido apuñalado a la altura del tórax.

Según relató la presunta homicida, quien no tiene antecedentes penales, ambos habrían estado bebiendo alcohol y por motivos que no se informaron se inició una discusión entre ambos que desencadenó en hechos de violencia intrafamiliar. Fue en ese contexto que la ciudadana extranjera apuñaló a su conviviente y luego fue a informar lo ocurrido a Carabineros.

La mujer quedó en calidad de imputada y fue trasladada a un centro asistencial para constatar lesiones; mientras que el Ministerio Público ordenó las diligencias del caso al OS9 y Labocar de Carabineros, que ayer realizaban diligencias para determinar cómo ocurrió este crimen.