Jóvenes con trastornos mentales usan las redes sociales de forma distinta
Un estudio ha corroborado que este grupo es más vulnerable a los comentarios recibidos y a los "me gusta".
Agencia EFE - Medios Regionales
Los jóvenes con algún tipo de trastorno mental dedican más tiempo a las redes sociales y, además, las utilizan de manera distinta a los que no los padecen, sobre todo los que sufren ansiedad y depresión, según un estudio de la Universidad de Cambridge.
Estos jóvenes, que pasan una media de 50 minutos más al día en las redes sociales, son más propensos a compararse con los demás en este entorno, se ven menos capaces de controlar el tiempo que dedican a estas plataformas y son más vulnerables a los comentarios recibidos y a los me gusta.
El trabajo está basado en información de evaluaciones clínicas sobre salud mental y en los datos de una encuesta del NHS Digital -organismo responsable de proporcionar información sobre el uso digital al Servicio Nacional de Salud de Inglaterra- a 3.340 adolescentes de entre 11 y 19 años del Reino Unido.
La investigación, publicada en Nature Human Behaviour, es una de las primeras en evaluar el uso de las redes entre los adolescentes y combinar esta información con los datos de evaluaciones clínicas de salud mental.
"Este estudio muestra que los jóvenes con problemas de salud mental utilizan las redes sociales de forma diferente a los jóvenes que no los padecen", lo que "podría deberse a que los trastornos mentales influyen en la forma en que los adolescentes interactúan con las plataformas o quizás a que el uso de las redes contribuye a sus síntomas. En este momento no podemos decir qué es lo primero, solo que existen estas diferencias", plantea Luisa Fassi, investigadora de Cambridge y autora principal del estudio.
Tipos de perfil
El estudio analizó las diferencias en la utilización de las redes sociales entre jóvenes con trastornos internalizantes, como ansiedad, depresión y trastorno de estrés postraumático, los que provocan una angustia emocional interna que puede ser invisible para los demás, y trastornos externalizantes, como el trastorno de déficit de atención (TDAH) u otros desórdenes de conducta, los que se manifiestan con comportamientos que afectan a las personas del entorno.
La mayoría de las diferencias en el uso de las redes sociales fueron señaladas por los jóvenes con trastornos internalizantes. Por ejemplo, la comparación social con los otros era dos veces mayor entre los adolescentes con estos trastornos (48%, aproximadamente uno de cada dos) que entre los que no padecían trastornos mentales (24%, aproximadamente uno de cada cuatro).
Los adolescentes con trastornos internalizantes también eran más propensos a declarar cambios de humor en respuesta a los comentarios de las redes sociales (28%, aproximadamente 1 de cada 4) en comparación con los que no padecían trastornos mentales (13%, aproximadamente 1 de cada 8).
Ellos también revelaron niveles más bajos de autocontrol sobre el tiempo que pasaban en las redes sociales y una menor disposición a ser sinceros sobre su estado emocional cuando estaban en línea.