l Pedro Bárcena González
En definitiva, se confirmó que el joven que mató a hachazos a su padre en el domicilio que compartían en el sector alto de Castro es inimputable. Un informe multidisciplinario ratificó el diagnóstico que se esgrimía, ya desde los albores de este impactante caso.
Desde el Instituto Psiquiátrico Dr. José Horwitz Barack de Santiago emanaron los antecedentes elaborados por un equipo de 11 profesionales, quienes examinaron al joven de iniciales C.H.N.H. (37) que permanecía internado en el área de salud del Complejo Penitenciario Alto Bonito desde fines de enero pasado tras ultimar a su progenitor, identificado como Hernaldo Nayán Hernández (62).
Los especialistas determinaron que el isleño posee esquizofrenia, patología que se le diagnosticó a los 16 años y que le producía constantes cuadros de ideación suicida y homicida, los que habrían gatillado el mortal ataque contra el carpintero en el sector Cancha Rayada.
solicitud
Bajo esta información, la defensa del chilote solicitó la suspensión del procedimiento penal y que se modifique la medida privativa de libertad que cumplía en la cárcel puertomontina.
Así lo indicó el abogado Luis Mora, añadiendo que "se ratificó que no es imputable y que actuó con intervalos no lúcidos, ante lo cual invocamos que finalice la persecución penal en su contra. Se determinó que constituye un peligro para la seguridad de sí mismo y de terceros, ante lo cual solo debe someterse a una medida de seguridad".
En una audiencia realizada este martes en el Juzgado de Garantía de la capital chilota se analizó este escenario. Así lo recalcó el fiscal de la causa, Enrique Canales, quien enfatizó que "por el informe de la unidad forense del instituto siquiátrico se estableció la inimputabilidad, por lo que el procedimiento pasa ahora a buscar una medida de seguridad, cuyo objetivo es una internación y tratamiento".
De esta forma, el cumplimiento punitivo tras los barrotes que pudo arriesgar el castreño por el delito de parricidio se descarta. Eso sí, el quántum de la sanción no se vería modificado.
Como explicó el persecutor, "se pide una internación en relación a las penas por el delito que se formalizó. Ya no sería Gendarmería el que vela por el cumplimiento, sino el servicio de salud respectivo".
Después del peritaje integrado de este puzzle de expertos, se espera el desarrollo de otras diligencias netamente investigativas.
De acuerdo al fiscal Canales, se espera "por pesquisas enfocadas en el sitio del suceso y los resultados de los análisis biológicos de las muestras que levantó la policía experta".
Mientras se espera por estas pericias, el joven ya no estará en Puerto Montt, sino que se aprobó su trasladó al ala de siquiatría del Hospital Regional de Temuco. J
l El defensor Filippo Corvalán (foto) tomó la audiencia en que se buscó suspender el procedimiento penal y tal como lo esgrimió al momento de ser formalizado su representado, pidió la modificación de la cautelar en su contra. En ese entonces, no se accedió a la solicitud que basó en el artículo 15 del Código Sanitario, pero ahora el contexto fue diferente.
"El informe siquiátrico determinó que no es imputable, por lo que las reglas generales esgrimidas en el procedimiento cambian", afirmó el profesional, recalcando que "lo más importante que se resolvió en la sesión judicial fue que ya no está más en prisión preventiva y que fue derivado a un área despenalizada del Hospital Regional de Temuco, como se pidió desde un comienzo".