Marcela Guajardo Pérez - La Estrella de Valparaíso

Es uno de los mayores temores dentro del mercado laboral: que la tecnología como la inteligencia artificial termine reemplazando a los humanos en todas las tareas.

Esta herramienta se ha utilizado para mejorar los procesos de producción de las fábricas, detectar anomalías en algunos productos y, recientemente, se ha utilizado para responder dudas en servicios al cliente.

Trabajos que eran antes bajo la administración de un humano, pero que ahora se hacen a través de aplicaciones de inteligencia artificial.

Pero un estudio realizado por la empresa internacional DuckerFrontier reveló lo contrario. La inteligencia artificial podría aumentar la cantidad de puestos laborales en Chile entre un 18% a un 54 por ciento.

Esta empresa que se dedica a hacer estudios de mercado realizó una simulación proyectando al país en diez años más, si tanto el sector privado como el público adoptaran esta tecnología.

La investigación la llevaron a cabo con datos actuales de organizaciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) y las cifras de productividad económica que tiene Chile actualmente.

Llegaron a la conclusión los autores que la inteligencia artificial provocaría cesantía, sino que crearía trabajos mejor calificados y con mejores remuneraciones para los trabajadores.

"El 54% de la fuerza laboral chilena sería de alta recalificación, duplicaría la productividad laboral de las empresas y también podría triplicar la economía del país. Pero esto es solo una simulación, para lograrlo hay que hacer un esfuerzo en todos los sectores: sociedad civil, academia, sector empresarial y también desde el Gobierno hasta que sea una tecnología que realmente empodere a todo el mundo y que sea inclusiva desde el punto de vista transversal para toda la sociedad", afirmó Alejandro Valerio, senior analyst de DuckerFrontier para Latinoamérica.

Alta calificación

Uno de los primeros cambios que se vería en el mundo laboral utilizando este modelo es la rebaja en las horas de trabajo.

Esto debido a que muchas tareas automatizadas y rutinarias serían adoptadas por la inteligencia artificial, por lo que el trabajador tendría que estar menos tiempo en su puesto.

Si el país invierte en la recalificación de los trabajadores existentes y la capacitación de los nuevos empleados, los trabajos de alta calificación podrían aumentar de 40% a un 54%. Esto significaría mejores sueldos para quienes se dediquen a este tipo de labores.

En el sector público, servicios de negocios y minería más de la mitad de los puestos de trabajo serían de alta calificación.

Incluso, rubros como la construcción también se verían beneficiados con la aplicación de la inteligencia artificial en sus procesos productivos.

Junto con aumentar los empleos, el estudio revela que la productividad del país también se vería altamente beneficiada por esta tecnología, triplicando su crecimiento en 2030.

Mejores trabajos y mayor productividad se traducen en un mayor crecimiento económico.

DuckerFrontier estima que el crecimiento medio entre 2018 y 2030 sea de 3,2% sin incluir la inteligencia artificial en procesos productivos. Si a esa estimación se suman los beneficios producto del uso máximo de esta herramienta tecnológica en el país, el crecimiento medio anual sería de 6,1%.

Este informe también incluye cómo está Chile respecto a otros países en Latinoamérica sobre la aplicación de la inteligencia artificial en el mundo laboral. De seis países analizados (Brasil, Argentina, Colombia, México, Perú y Costa Rica), aparte del nuestro, Chile es el más preparado para aprovechar y generar oportunidades en el campo de la inteligencia artificial, donde se midieron el entorno de innovación el ecosistema tecnológico y el capital humano.

Desafíos

Para lograr esto, según el análisis, existe un desafío primordial: asegurar igualdad de oportunidades. Es necesario reentrenar a los trabajadores en las nuevas habilidades y herramientas que exige la llamada Cuarta Revolución Industrial, acercando de manera innovadora la tecnología a las empresas, establecimientos educacionales y a las personas.

"La historia nos ha demostrado que cada revolución industrial ha requerido nuevos aprendizajes y recapacitación. En este nuevo paradigma es imperativo adquirir habilidades digitales para generar más oportunidades para todos los chilenos. Hoy el llamado es a adquirir habilidades digitales, no solo en las generaciones nuevas, sino también en las que ya están trabajando. Por eso, desde Microsoft colaboramos con instituciones públicas y privadas con las que buscamos contribuir a reentrenar a las personas en el país", dijo Sergio Rademacher, gerente general de Microsoft Chile, firma que encargó el estudio.

"El 54% de la fuerza laboral chilena sería de alta recalificación, duplicaría la productividad laboral".

Alejandro Valerio, senior analyst de DuckerFrontier para Latinoamérica."