Menor reconoce robo de fármacos y dinero de una farmacia en Queilen
Efectivos de la SIP de Quellón dieron con el paradero del imputado quien quedó apercibido a la Fiscalía.
Apercibido a prestar declaración ante el Ministerio Público quedó un adolescente, quien confesó el atraco a una farmacia en Queilen urbano. Y no fue el único ataque, ya que su propia madre entregó especies de un robo perpetrado solamente dos días antes en el mismo lugar.
Los ilícitos afectaron al local Buena Vida, emplazado en calle Pedro Aguirre Cerda del poblado. Mientras en el primero su propietaria no denunció los hechos, en el segundo, por la gravedad de los daños y las pérdidas, de inmediato notificó lo sucedido al Retén de Carabineros local.
El último atraco quedó a descubierto cuando la propia dueña comenzaba su jornada laboral, el miércoles. Al detectar el desorden en el recinto y los daños en un ventanal lateral, denunció lo sucedido. Cerca de medio millón de pesos fue el avalúo de lo sustraído, entre dinero en efectivo, fármacos y perfumes.
Tal como especificó el mayor Iván Ulloa, jefe de la Sexta Comisaría de Carabineros de Quellón, con jurisdicción en la zona, ante los datos recibidos "efectivos de la SIP (Sección de Investigaciones Policiales) de la unidad base se constituyen en el lugar para realizar las diligencias en busca de él o los responsables del delito".
Los funcionarios policiales no solo recogieron los antecedentes de la víctima y testigos, sino que también levantaron evidencia biológica (sangre) del recinto, como también un teléfono celular encontrado en las proximidades.
Dato
Además, clave para las diligencias fue el antecedente entregado por una vecina el día anterior, quien se acercó hasta el cuartel queilino entregando unos medicamentos que su hijo mantenía en su mochila. El menor de 17 años se convirtió en el principal sospechoso. Y las pruebas fueron contundentes en su contra.
"Los efectivos de la SIP se constituyen en el domicilio, se entrevistan con una mujer (hermana del imputado) que accede al ingreso voluntario y el personal encuentra prendas con sangre de un menor que manifestó que ingresó a la farmacia", sostuvo el comisario.
Junto con reconocer su participación en el ilícito y la propiedad del celular incautado, el encartado dio cuenta que dejó el botín en una multicancha del sector. En ese lugar se recuperó medio centenar de fármacos.
El isleño fue detenido en flagrancia por robo en lugar no habitado. Además, el fiscal adjunto de Castro, Fernando Metzner, instruyó la remisión del parte policial, con el set fotográfico del sitio del suceso y derivar tanto las muestras de sangre levantadas en la farmacia como las evidencias (ropa) encontradas en el domicilio del menor al Laboratorio de Criminalística (Labocar) para el cotejo de ADN.
Como expuso el persecutor, "el menor quedó apercibido" a entregar su versión de los hechos. Todo ello mientras llegan los informes policiales por este atraco.