Selección de tenis playa: cómo practicar sin arena hasta el retorno a la actividad
Felipe Araya, capitán y entrenador del equipo, explica los trabajos físicos que hacen en medio de la pandemia del nuevo coronavirus.
Nicolás Labra G. - Medios Regionales
A diferencia del fútbol, que paralizó su actividad a mediados de marzo, el tenis de playa tuvo su último torneo a principios de ese mes en Algarrobo, elevando el parón deportivo a tres meses sin actividad debido al coronavirus. El 10 de marzo se habían establecido las prenóminas de seleccionados para comenzar los trabajos con miras al Mundial de Rusia -que ya fue cancelado- y a más largo plazo pensando en Tokio 2021 y los Panamericanos de Santiago 2023.
Pero todo quedó en pausa, y según Felipe Araya, capitán y entrenador de las selecciones nacionales de la especialidad, el trabajo se ha ido retomando de a poco: hace dos semanas con las damas y la pasada con los varones.
Lo primero fue un test físico para saber el estado en que se encuentran. "Marcelo Venegas (preparador físico y jefe de desarrollo deportivo de la Pontificia Universidad Católica de Chile) me recomendó una evaluación que se hace en el club. Son cosas básicas como un test de abdominales, test de flexiones de brazos y de salto", explica.
En el caso de las mujeres, el monitoreo es obviamente a distancia y a través de plataformas como Zoom, e incluyen trabajos como los que Araya describe: "Hay un trabajo funcional con pesas, botellas y se hace uno de fuerza y desplazamiento para que no se olvide el desplazamiento en la cancha. Se hace también otro de skipping con desplazamientos laterales, ir a buscar la pelota adelante y atrás".
Si el futbolista ha perdido el contacto con el balón, en el caso del tenis playa ha sido con la arena, escenario que requiere otro tipo de esfuerzo e impacto tanto en tobillos, piernas y rodillas. Araya, que también es profesor de educación física, enfatiza cómo lo están abordando debido al encierro.
"Acá tienes mucho más impacto porque estás en un piso, entonces hay que tener más cuidado. Para eso se hacen trabajos específicos de desplazamiento y no tanto de rebote y cosas que impliquen alguna lesión. Lo ideal es que cuando volvamos por lo menos tener tres semanas de adaptación a la arena", dice.
En septiembre
A nivel nacional estaban programados 16 torneos locales más cuatro internacionales con sede en Iquique. A nivel planetario, del 6 al 12 de julio estaba presupuestado el Mundial en Rusia, cancelado igual que la totalidad de la gira en Europa, y que según el calendario de la ITF recién tiene torneos programados para septiembre en Japón, misma fecha que estima podría ser para el retorno en el país.
"Queremos que baje un poco esto por el coronavirus y estimamos esa fecha. Esperamos que el Gobierno decrete en el Diario Oficial que se puede realizar actividad física. Hasta el momento no hay nada", cuenta. Del trabajo actual agrega que "a estas sesiones hay que darle mucho físico, para que después se adapten a la arena y de ahí el jugar y hacer situaciones de juego".
La idea, según Araya, es llegar en óptimas condiciones al Panamericano de Aruba en noviembre, que todavía no está confirmado. Mientras se espera eso, también le preocupa el aspecto psicológico de sus dirigidos: "Están pendientes de lo que está pasando, si me contagio o no, qué va a pasar. Aparte con el tema de jugar se olvidan de algunas cosas técnicas o tácticas. Va a estar muy difícil".
16 torneos locales y 4 internacionales estaban programados en Chile. Todo está suspendido.