Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Deportes
  • Clasificados
  • Servicios
  • Estrellas

Marino chilote apoya controles por el covid a 3 mil kilómetros de casa

Teniente de la Armada nació en Chonchi y hoy se encuentra en Iquique cumpliendo labores de resguardo por la crisis sanitaria del nuevo coronavirus.
E-mail Compartir

El despliegue de seguridad para el cumplimiento de las medidas sanitarias por la pandemia del covid-19, no sólo ha implicado el arribo a Chiloé de batallones de infantería de marina de otros puntos del país. También existen isleños que desarrollan funciones en lugares distantes. Y la experiencia de un joven chonchino es el claro ejemplo.

Se trata del teniente litoral Jorge Muñoz (28), quien a 3 mil kilómetros de distancia se encuentra de servicio en la capital de la Región de Tarapacá.

El chilote ingresó a la Escuela Naval Arturo Prat el 2010 motivado por su padre, un suboficial litoral artillero, y las ganas de "servir a mi país y poder ayudar a las personas en momentos de crisis", comenta.

Hoy, en medio de la contingencia del nuevo coronavirus el oficial cumple su sueño al apoyar en terreno las tareas que la Armada realiza para contener los contagios.

"El 27 de julio de 2020 me destinaron a la Gobernación Marítima de Iquique donde me desempeño como jefe del Departamento de Intereses Marítimos. Desde que empezó la pandemia, me he desplegado en patrullas al cumplimiento de la cuarentena y el toque de queda, así como en apoyo a diversos checkpoint de la zona", explica.

Si bien, confiesa que la experiencia en general ha sido buena, agrega que "lamentablemente hay muchas personas que incumplen las normas y, peor aún, exponen a los niños. Es un verdadero desafío hacer entender a las personas aquí en el norte, y que están acostumbradas a las actividades al aire libre, que deben mantenerse en sus hogares. Ése ha sido, sin duda, el desafío más grande".

Por otra parte, el uniformado asegura que "encontrar tantas personas sin sus respectivos permisos para transitar nos obliga tomarlos detenidos o dejarlos a disposición de la Fiscalía, situación que es compleja porque uno entiende las dificultades que genera este hecho, pero nuestra misión es el cumplimiento de las medidas sanitarias para evitar que aumenten los contagios".

Madrugada

En el norte del país, así como en todo Chile, las jornadas que viven los marinos desplegados por la crisis sanitaria no varían mucho, dependiendo del rol en el que se desempeña cada funcionario. En el caso del teniente Muñoz, comienza todo de madrugada, sobre todo cuando debe apoyar algún dispositivo de control. "Ahí empezamos a cubrir a contar de las 6.15 horas, extendiéndose hasta el mediodía y posteriormente continuamos con el trabajo normal de documentación y atención de público", comenta.

Sin embargo, el oficial reconoce que "el mando se ha preocupado de los descansos, dentro de lo posible, para que todos repongamos fuerzas". Una rutina que se extiende desde el 18 de marzo, día en que se desplagaron las fuerzas.

Es así que, desde esa fecha, el chonchino no ve a sus padres o hermanas, con quienes estaba acostumbrado a mantener una constante comunicación por teléfono o redes sociales.

"Lo más difícil son las celebraciones familiares, los cumpleaños, el día de la madre o del padre. Se extraña el ambiente hogareño, los asados de fin de semana y las juntas, sin embargo, saber que estoy cumpliendo con mi deber me llena de alegría y orgullo, y me motiva a seguir adelante", concluye.

Recambio

Dentro del constante movimiento de la Armada, en los últimos días llegaron a Chiloé 34 funcionarios pertenecientes al batallón "Lynch", perteneciente a la Cuarta Zona Naval de Iquique, que reemplazaron al destacamento de Infantería de Marina N°4 Cochrane de Punta Arenas.

Redacción

cronica@laestrellachiloe.cl