Nicolás Labra G. - Medios Regionales

Apelando a la histórica frase "justicia divina" de Julio Martínez, el Twitter de San Marcos de Arica celebró así el triunfo como visita 1-0 sobre Santiago Morning, disputado ayer en el Elías Figueroa de Valparaíso. Todo un desahogo después de la serie de sucesos que pasaron en el partido y que tuvieron en el centro de las críticas al árbitro Fernando Véjar.

La primera polémica llegó rápidamente al minuto siete del cotejo. Tras una falta fuera de la medialuna, a unos 23 metros del arco de Leandro Cañete, el jugador de San Marcos Eduardo Vilches clavó un derechazo que dio en la parte interna del travesaño, bajó y salió sin que Cañete la desviara. Era un claro gol.

Jorge Faúndez y Mauricio Godoy levantaron los brazos mirando al juez de línea en una especie de celebración, pero al mismo tiempo pidiendo una explicación, porque no corrió hacia el centro de la cancha.

"La pelota se va al lanzamiento de esquina. ¡Me quedé con el grito de gol atorado, con el gol atragantado!", relató Alejandro Lorca en el Canal del Fútbol.

Véjar miró a su ayudante, pero sin una respuesta mantuvo la decisión del córner. Sin el VAR en la Primera B, el enojo ariqueño estaba consumado: "Leemos sus hipótesis del por qué no nos cobraron este gol", escribió la cuenta de Twitter, aprovechando el título "IN-SÓ-LI-TO" con el que el CDF publicó la repetición que mostraba que la pelota efectivamente entró, y con amplio margen como para no dudar del cobro del guardalínea.

"Pedazo de gol", enunció el comentarista Cristian Basaure tras ver la repetición. "Epaaa, ¡pero es un metro adentro, maestro!", agregó Lorca. "¡Dos metros!", retrucó Basaure, incrédulo ante la situación en Valparaíso.

Para añadir más errores a su desafortunada jornada, al iniciar el segundo tiempo el árbitro Véjar hizo sonar su silbato mientras el arquero ariqueño Brayan Manosalva recién ingresaba a la cancha. Pese a la partida falsa y el gol anulado, los celestes ganaron gracias a un tanto de Nahuel Donadell en los descuentos. Justicia divina, como dijeron en Arica.

Claudio Bravo, que dejó buenas sensaciones en su debut en el arco del Real Betis, habló con los medios oficiales del club, insistiendo en su idea de entregarle mayor jerarquía y competitividad a una plantilla que sufrió mucho a nivel de resultados en la última temporada.

"Tienes que prepararte muy seguido para volver a competir e intentar ganar. La receta es no relajarse y centrarse en querer siempre ganar más. ¿Si lo veo ya en el vestuario? La confianza también es vital en este tipo de situaciones", dijo el chileno.

El debut, auspicioso con un triunfo de visita ante el Alavés, abre esperanzas al portero y al técnico Manuel Pellegrini. "Los cambios que hizo el míster habla también del buen trabajo que están haciendo todos. Habla bien también de la mentalidad que tenemos todos. Y es lo que tiene que perdurar hasta el final", agregó.

De su tapada a un cabezazo de Rodrigo Battaglia, contó que "si ese cabezazo hubiera ido a una escuadra o a un lado, me hubiera costado más. Pero estuve ahí (...). Trabajo para ganar, no me gusta perder. Soy ambicioso. No me gusta tirar una semana a la basura".

El domingo el Betis recibirá al Real Valladolid de Fabián Orellana a las 13.30 horas, y sobre lo que necesitan mantener, acotó que "si desde arriba el funcionamiento es malo, nos llegarán más y nos crearán más peligro en nuestra área. Que nuestro primer defensa sea nuestro delantero".

Joaquín Larrivey vive optimista el presente de Universidad de Chile. Con dos triunfos al hilo y él en racha goleadora, con nueve goles, está disfrutando de un buen momento. "Lo defino como muy bueno. Siempre me he entrenado de la mejor manera y aportado positivamente un par de cosas, siempre aspiro a ser mejor cada día", dijo.

Eso sí, asume que todavía tiene mucho por mejorar en su juego, pese a participar en el 50% de los goles del club. "Tengo muchas cosas a mejorar. Por supuesto que da mucha confianza hacer goles y ayudar al equipo", agregó.

Actualmente la 'U' marcha en el segundo lugar con 22 puntos, a seis de Universidad Católica, a falta del partido de hoy de Unión Española con Antofagasta. El argentino cree que el lugar está justificado por cómo han venido jugando: "La tabla pocas veces miente. Hoy, más allá que le toque jugar a Unión Española, somos el segundo mejor equipo de Chile porque así lo reflejan los resultados".

Tampoco no descarta meterse en la pelea por la corona con los cruzados, impecables líderes hasta ahora. "Pueden pasar muchas cosas, haber rachas, hay equipos que juegan Copa Libertadores y eso implica desgaste físico y mental. Al final del torneo vamos a ver para qué estamos", catalogó.

Consultado por no poder jugar siempre como local en el Estadio Nacional, se resignó y comentó que en una situación tan particular tenemos que adaptarnos a lo que se vaya planteando e intentar ganar en cualquier cancha, es nuestra mentalidad".