Pedro Bárcena González

En calidad de detenidos hasta mañana quedaron dos jóvenes implicados en un confuso incidente registrado al interior de un domicilio del sector Caipulli, comuna de Ancud, que terminó en una frenética persecución policial que se extendió por casi 10 kilómetros. Cuatro ilícitos se le asocian a los amigos.

La denuncia del dueño de esta casa emplazada en la localidad rural del norte de la Isla activó el procedimiento de Carabineros de la Primera Comisaría local, que desplazó tres móviles, dos de los cuales fueron impactados por la camioneta en la que escapaban los sospechosos.

Así lo describió el teniente Pablo Guzmán, oficial de la unidad base y que lideró el operativo, añadiendo que la víctima de 27 años llamó al nivel de emergencia alertando de la situación.

"Dio cuenta que dos sujetos ingresaron a la vivienda y comenzaron a agredirlo, al parecer por rencillas anteriores. Le sustrajeron un televisor y un minicomponente, con los cuales huyeron en un vehículo", apuntó el jefe policial.

Como describió la fuente, a la altura del puente Caipulli, los efectivos que acudían al denuncio en un radiopatrulla detectaron el móvil. "Los funcionarios, en medio del viaducto, debieron esquivar a la camioneta que igual los colisionó y siguió avanzando", apuntó, sumando que en una unidad de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) comenzó a realizar el seguimiento de los imputados.

Por la Ruta 5 Sur hasta el sector de Huicha se dirigieron los sospechosos, quienes al observar que eran perseguidos no dudaron en actuar. "Vieron que veníamos con las balizas y nos chocaron por el costado derecho del pickup, nos embistieron y siguieron su marcha. Luego, perdieron el control al ver otro vehículo de Carabineros, con lo cual los detuvimos", detalló.

Al interior de la máquina en que circulaban los encartados se logró encontrar las especies denunciadas. Ambos fueron detenidos por robo con intimidación, daños (a vehículos fiscales y uno particular), atentar contra la salud pública y el conductor por manejo en estado de ebriedad.

Tanto el chofer (de origen penquista) de iniciales T. A. G. M. (23) como el isleño identificado como M. R. D. I. (31) fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía de Ancud, donde el magistrado Bruno Casale acreditó la legalidad del procedimiento policial.

Durante la misma audiencia remota, la fiscal (s) María Paz Parada invocó la ampliación de la detención con el objeto de reunir antecedentes para preparar la formalización.

"Se busca dilucidar la dinámica con respecto a la sustracción de las especies de propiedad de una de las víctimas, puesto que los otros ilícitos están más claros", sostuvo la persecutora.

Insistió la abogada que se aguarda por las diligencias de la SIP para esclarecer por completo la dinámica de todos los hechos. Dentro de estas pesquisas se espera la declaración de los involucrados.

Defensa

Por su parte, la defensora Fernanda Molina se opuso a la prórroga solicitada por el Ministerio Público. Explicó que "no eran suficientes los antecedentes para una ampliación, cuyo fundamento es preparar la presentación no realizar diligencias. Para formalizar por el supuesto robo con intimidación lo que quiere hacer la Fiscalía es realizar pesquisas, puesto que no hay evidencia para sustentar este delito".

Expuso la profesional, según la versión de sus representados, que ellos conocían a las víctimas. "Estuvieron compartiendo y se generó una discusión por unas diferencias anteriores que se están indagando", puntualizó.

Finalmente, el sentenciador dictó un plazo de ampliación de tres días. Con ello, mañana serán informados los jóvenes de los ilícitos por los cuales serán indagados y las cautelares en su contra. De confirmarse el atraco, el ente persecutor invocaría la prisión preventiva para ambos.

1,0 marcó el chofer en el Intoxilyzer, prueba que sustenta la ebriedad al conducir.

133 nivel al que llamó el dueño de la casa donde se produjo el incidente y supuesto robo.

2009: el mayor de los imputados fue condenado por un homicidio en Fresia.

5 años de libertad vigilada le dieron al isleño por el asesinato de un joven de 31 años.

Tras reconocer su responsabilidad en dos siniestros viales generados por el consumo etílico, un joven fue sentenciado ayer a dos penas de 61 días de presidio, con el beneficio de la remisión condicional por 18 meses.

El último caso se produjo alrededor de las 20 horas del lunes, cuando el imputado de iniciales V. B. A. H. (36) se incrustó con su auto en una vivienda de la villa Guarello, en la capital provincial. Milagrosamente, resultó con lesiones leves, mientras que ningún morador se vio afectado.

Hasta el lugar llegó la Unidad de Rescate de Bomberos y el SAMU prestó asistencia al paciente que fue remitido al Hospital de Castro.

Por su parte, ayer el isleño fue formalizado por conducción en estado de ebriedad causando daños. El alcotest al que fue sometido marcó 2,5 gramos de alcohol por litro de sangre.

En la audiencia remota se agrupó la causa a otra que tenía el encartado por otro manejo etílico sin tener licencia de conducir del 18 de septiembre pasado y negativa a la alcoholemia.

"Por no tener condenas anteriores y al aceptar su autoría en los delitos, accedió a un simplificado y a una pena remitida por un año y medio, tiempo en que se mantendrá firmando", aclaró el defensor Juan Manuel Castro.

En tanto, la fiscal (s) Carmen Paz Vargas reportó que como sanción accesoria "quedó con la imposibilidad de obtener licencia de conducir por dos años por la primera causa y por otros cinco años por el hecho más reciente".