Invocan perpetua simple contra joven que asesinó a su papá en barrio castreño
Enfrenta cargos por parricidio tras letal estocada en el corazón a la víctima.
Con 38 medios de prueba el Ministerio Público buscará acreditar la participación de un sujeto en el asesinato de su padre, ocurrido en plena vía pública de la población Padre Hurtado de Castro. Una letal estocada al corazón de la víctima, por la cual invocaron la pena de cadena perpetua simple (20 años efectivos de cárcel antes de optar a beneficios) para el encartado.
El fiscal Luis Barría, quien instruye la causa, presentó recientemente la acusación contra el imputado de iniciales J. A. O. N. (31), sindicado como el responsable de ultimar a Jaime Obando Sánchez (54) el 7 de abril del 2020, tras propinarle una cuchillada cuando discutían en calle Inés Muñoz de García.
De acuerdo a lo señalado por el persecutor, en su requerimiento "incluimos testigos civiles, carabineros, como también funcionarios de la Brigada de Homicidios (BH) que realizaron la investigación. Igual sumamos peritos del Servicio Médico Legal (SML)".
Como "concluyentes" califica el abogado los informes reunidos durante la investigación. Una serie de antecedentes que establece la dinámica de lo sucedido esta fatídica jornada en el sector alto de la capital chilota.
"Los datos recabados nos permiten determinar que, tras salir de la vivienda, el acusado atacó sin mediar alguna agresión previa a su padre, ocasionándole la muerte", remarcó el jurista.
Igualmente, el profesional justificó la alta condena invocada, "considerando la gravedad del delito, que es sancionado con penas que van desde los 15 años y un día de presidio hasta perpetua calificada".
Esta pretensión punitiva fue valorada por el querellante en esta causa. Álex Contreras, coordinador del Centro de Apoyo a Víctimas de Delitos (CAVD), que representa a María José Obando (23), hija de la víctima, confirmó que se van a adherir a esta acusación.
"La pena invocada es proporcional al mal provocado. Por eso, esperamos poder demostrar la existencia del delito y la intervención del imputado, para así lograr una condena por parricidio, que permita reparar en parte el gran daño causado", explicó el abogado.
Postura
Por su parte, el defensor Juan Manuel Castro manifestó que su postura para el próximo juicio oral estará enfocada en dos aristas.
"Solicitaremos, por un lado, la legítima defensa", esgrimió la fuente, en base a los antecedentes del caso que dan cuenta que la víctima habría portado un hacha al momento de discutir con su hijo y salir de la vivienda en que se encontraban.
Igualmente, el profesional baraja otra alternativa, que es el concurso de la inimputabilidad disminuida. Después de descartarse por parte del SML que el isleño no puede enfrentar un proceso penal, el defensor insistirá en informes periciales que reflejarían algún padecimiento mental de su representado.
Según especificó Castro, existen certificados del Hospital Penitenciario de Puerto Montt, firmados por la siquiatra Mónica Almonacid en un informe del 17 de julio pasado, los cuales "dan cuenta que el joven padece de discapacidad intelectual moderada y daño orgánico cerebral, contando también con antecedentes de microsicosis". Apuntó que estos datos podrían haber incidido en su actuar durante el crimen.
De esta forma, la próxima instancia procesal será la preparación del juicio que quedó fijada para el 19 de mayo en el Juzgado de Garantía castreño, donde se depurará la prueba que finalmente será expuesta ante el Tribunal Oral en lo Penal de la capital provincial.