Indagan a pescadores tras incautación en Quellón de $60 millones en salmones
Pese a declararse ilegal la detención de los primos, ambos fueron formalizados por receptación de una carga superior a las 9 toneladas de pescados.
Sin cautelares y formalizados por receptación quedaron en las últimas horas dos primos involucrados en un amplio operativo naval que terminó en la incautación en Quellón de más de 9 toneladas del salmones. La carga fue sustraída en Puerto Cisnes, Región de Aysén, siendo avaluada en más 60 millones de pesos.
El dispositivo se gestó tras una alerta activada por el robo de estos ejemplares salmonídeos desde el centro de cultivos Melimoyu. La Capitanía de Puerto de Quellón desplegó sus medios, realizando patrullajes preventivos en áreas de desembarco aisladas y no autorizadas, en busca de estos verdaderos "piratas".
Las diligencias surtieron efecto y en el estero Huildad, en las cercanías de Punta Tutil, la Policía Marítima quellonina detectó una embarcación ilegal, desde la cual traspasaban pescados a un furgón y una camioneta. Cinco sujetos realizaban las maniobras y tres se dieron a la fuga. Los funcionarios lograron atrapar a dos sospechosos.
Tal como explicó el capitán de corbeta, Ricardo Henríquez, jefe de la unidad naval porteña, el operativo se extendió por más de 14 horas, desde la notificación del delito de apropiación hasta la aprehensión de los imputados.
"Se logró además de detener a dos personas, la incautación de una camioneta Nissan NP-300, un furgón Peugeot Boxer, una nave menor sin nombre, ni matrícula y el total de 9.028 kilogramos de salmón tipo salar (del Atlántico)", recalcó el capitán de puerto.
Audiencia
Los parientes de iniciales Ó. A. N. N. (29) y A. E. C. N. (30) fueron puestos a disposición del Juzgado Mixto de Quellón. En la audiencia virtual, el defensor Carlos Barahona incidentó la legalidad de la aprehensión.
"Mis representados fueron detenidos por un supuesto delito flagrante. Estimamos que se trató de una detención ilegal, ya que no existía el indicio que facultara a los funcionarios de la Armada para realizar un control de identidad. Tampoco quedó acreditada la hora de la denuncia de la supuesta sustracción de los salmones", manifestó el abogado.
El magistrado Pablo Farfán acogió los postulados del defensor y decretó que el procedimiento estuvo viciado. No obstante, el Ministerio Público igual inició una indagatoria contra los jóvenes.
La fiscal Karyn Alegría formalizó a los encartados por receptación. Por la misma incidencia decretada, ambos quedaron sin medidas precautorias.
"Durante la investigación (plazo de 45 días) que será llevada a cabo por la Avanzada de la Policía de Investigaciones se buscará acreditar la existencia del delito, más allá de las pericias que se puedan efectuar en la jurisdicción de Cisnes por el robo de las especies", consignó la jurista.