Bullying escolar en tiempo de covid-19: sepa cómo detectarlo
En pandemia se han observado distintas maneras de violencia y acoso entre estudiantes de diferentes niveles.
Matías Gatica Lindsay Medios Regionales
Con la llegada del covid-19 son muchas las actividades que se han visto modificadas debido al confinamiento, una de ellas son las clases online en etapa escolar. Y es que los niños y niñas han debido adaptarse a las clases en confinamiento, las que poco a poco han ido volviendo a la presencialidad.
A pesar de estos cambios, el acoso escolar ha seguido presente durante este tiempo solo que ahora son otros los métodos usados por los agresores, mucho más basados en la vida virtual.
Al respecto la psicóloga infantil, Maribel Corcuera, comentó la situación en el contexto del "Día de la Tolerancia".
"Con la llegada de la pandemia y sobre todo este año, el bullying ya no tiene que ver tanto con rasgos físicos de personalidad ni de nada. Lo que ha pasado es que los niños y niñas han retrocedido en su proceso de socialización y esto ha llevado a un retroceso de tolerancia y respeto hacia los otros, sobre todo en niños de prebásica y primeros años de colegio que están adquiriendo sus habilidades sociales", dijo.
Y es que hoy, según aseguró la experta, "los niños se mueven no solo en el entorno presencial, sino también el digital y los padres deben saber con quienes se relaciona su hijo o hija, conocer a los amigos, a los no tan amigos, a qué juegan, con quienes juegan, quienes son los padres de estas personas".
A su vez también los padres deben ser capaces de detectar los cambios de conductas en sus hijos. "Si un niño es víctima de bullying va a tender a retraerse, van a dejar de contar las cosas que ocurren en el colegio, no van a querer participar en actividades, no quieren ir a los cumpleaños, pueden llevar dos colaciones, andan tristes con bajo ánimo y no duermen bien", apuntó.
Por otra parte, es importante que la acción de los padres no sea acusatoria hacia el menor. "Cuando detecto que esto ocurre jamás debes retarlos, debes acogerlo, desde los dos lados, tanto de la víctima como del victimario. Hay que enseñarles que eso es violencia y eso no debe aceptar nunca. Si los papás no han conversado con el colegio deben en seguida tener reuniones con el profesor(a) jefe. En algunos casos algunos necesitan un tiempo para dejar de ir al colegio, hay otros que se quedan más tranquilos haciendo una reunión. Es importante que se sientan apoyados pero no ahogados", mencionó.
Sobre el perfil tanto de víctimas como de victimarios, la especialista comentó que "muchas veces se tiene un estereotipo que quien realiza bullying es una persona violenta, que no ha recibido cariño que no tiene límites y efectivamente puede ocurrir, pero por otro lado puede ocurrir que al ser validado por mi grupo de pares sigo con esta conducta solo por ser validado sobre todo en la adolescencia. Por su parte los victimarios no siempre son el niño retraído porque eso depende del entorno".
Finalmente la psicóloga manifestó que "hoy uno de los métodos más utilizados es el trabajo con los espectadores del bullying, ni siquiera con el que lo realiza o el que lo recibe, sino que con todo el resto que lo ve que lo frene, porque mientras más soy el choro o la más chora del curso porque hago esto, se va a mantener".