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fiscalización de carabineros en puñihuil.-

Efectivos de la Primera Comisaría de Carabineros de Ancud, con jurisdicción en esta comuna y también en Quemchi, en el marco del Plan Verano Seguro, se trasladaron a Puñihuil, caleta famosa por sus locales gastronómicos y porque desde allí salen los viajes regulares para disfrutar de la rica fauna de los islotes que son Monumento Natural y sus alrededores. El operativo se efectuó ante la masiva llegada de turistas a una de las localidades preferidas por los visitantes que andan en Chiloé.

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El sector salud chileno es un sistema de carácter mixto, compuesto de dos subsistemas, el público (Fonasa, el Fondo Nacional de Salud) y el privado (las isapres, instituciones de salud previsional). Al primero está adscrito el 80,4% de la población, mientras el 19,6% adscribe al sector privado, de acuerdo a la información de la Superintendencia de Salud. El acceso a uno u otro está determinado por la capacidad de pago de los individuos; es decir, que aquellos que pueden pagar un seguro de salud acceden a centros privados para la atención de sus necesidades sanitarias, mientras que los que no pueden adquirir el seguro deben recurrir a centros públicos para su atención.

El Censo 2019 concluye que la población de nuestro país envejece de manera acelerada, pasando de ser el 6,6% el año 1992 al 11,4% al 2017. Para el 2035 el INE (Instituto Nacional de Estadísticas) proyecta que la población mayor de 65 años será el 19% del total nacional. La Región de Los Lagos contabiliza casi 160 mil adultos mayores, representando al 17,7% de la población del territorio.

Diversos estudios han establecido que un tercio de los adultos mayores no alcanza a cubrir sus necesidades con sus ingresos, mucho menos le alcanzará para pagar un seguro en isapre, por lo cual se engrosará la demanda de prestaciones para el tratamiento de sus enfermedades en el sector público de salud.

Ante esto surgen algunas preguntas: por ejemplo, ¿cómo se absorberá esta demanda?, ¿cómo se modernizará la atención para entregar una atención oportuna, segura y de calidad a nuestros adultos mayores?, ¿qué políticas públicas se pueden implementar para mejorar la calidad de vida de este grupo etario que les permita prevenir la aparición de enfermedades crónicas?, entre otras.

En este sentido, el nuevo Gobierno tiene el desafío de convocar a todos los actores sociales, sin egoísmos políticos, para atender esta necesidad pública como una política de Estado a fin de establecer a la dignidad como un factor constructor de legítimas políticas sociales. No olvidemos que, al final, todos seremos adultos mayores.