Fernando Ubiergo lanza disco con canciones que abordan contingencia
A sus 67 años, el creador de himnos como "El tiempo en las bastillas" y "Cuando agosto era 21" sigue atento a las noticias para transformarlas en canciones. La nueva placa estará disponible en marzo.
Rodrigo Castillo R. - Medios Regionales
Un apasionante debate se estaba desarrollando en casa de Fernando Ubiergo. Había que decidir cuál será el primer single de su nuevo álbum. La canción llegará en marzo a las plataformas digitales y será seguida por otras composiciones inéditas que se irán sumando hasta completar algo que, más que un disco tradicional, será lo que el mismo artista llama "una colección de canciones". Será la primera vez que ofrezca algo así desde 2003, cuando lanzó la placa en formato físico titulada "La sombra del águila".
"Estamos acá en una muy buena discusión, peleando entre tres canciones que son posibles singles. Yo creo que al final vamos a decidirnos por 'Farah', que es un tema sobre un niño sirio que se llama así y que cruza el Mediterráneo en brazos de su madre, porque ambos son refugiados", comentó el legendario intérprete que en el Chile de las décadas 1970 y 1980 andaba en boca de todos gracias a éxitos radiales como "Un café para Platón", "El tiempo en las bastillas" y "Cuando agosto era 21".
A sus 67 años, el cantautor de la mirada melancólica sigue conectado con la actualidad noticiosa. No estaba tan desencaminado, entonces, cuando en su adolescencia estudió periodismo y sociología, carreras por las que pasó fugazmente y que desechó cuando vio que la mejor forma de abordar esos problemas era con una guitarra.
"Yo soy un autor de temáticas. En 'Cuando agosto era 21' escribí sobre el aborto en una época en que no se podía ni decir esa palabra. Escribí sobre el autismo, sobre los viejos, sobre la violencia intrafamiliar y también sobre la separación, con 'Los ojos de Rodrigo', y en este nuevo disco uno de los temas claves es sobre la migración", adelanta este trovador acústico que entre 1975 y 1977 logró ganar seis festivales, para luego obtener el primer lugar en el Festival de Viña del Mar en 1978.
Ahora, instalado en un mundo muy distinto, tras la pandemia y en una escena musical en la que existen múltiples caminos digitales para que un artista se haga famoso, Ubiergo ya está retomando lo que mejor sabe hacer: escribir canciones e interpretarlas frente al público.
El 7 de enero se presentó en Olmué, donde revisó sus más de cuarenta y cinco años de carrera, en un concierto con aforo restringido, y últimamente también ha confirmado la vigencia de su legado en Spotify. Según cifras anuales que le entregó esa plataforma, durante 2021 sus canciones tuvieron 2.600.000 reproducciones y fueron consumidas por 526 mil oyentes de 106 países.
"Durante el último año estuvimos subiendo más títulos de mi discografía, porque hasta 2020 en Spotify solo estaban disponibles tres discos míos. Ahora ya hemos subido más de la mitad de mi catálogo, y en este período vimos que había mucho interés por mi trabajo. Uno se alegra enormemente al recibir estas noticias. Además vi que los países donde más se consume mi música son, en gran parte, los mismos donde alguna vez me presenté en vivo. Me refiero a toda la costa del Pacífico, incluyendo Ecuador, Perú, Centroamérica. En esos países hay públicos cautivos que son proporcionales a una carrera tan dilatada como la mía, y que prefieren un tipo de música, como la que yo hago, que actualmente no es de interés masivo", razona el cantautor.
-¿Has escuchado música actual, como el reggaetón y el trap?
-Sí, algo conozco, aunque no soy muy entendido. Yo soy súper respetuoso de todas las formas de música y no termino de asombrarme ante la infinita capacidad creativa de los músicos, artistas, compositores. También me asombra la inmensa variedad de gustos que hay en las personas.
-Tú triunfaste a través de un sistema mucho más difícil: ganar el festival, llegar a la televisión, obtener el contrato.
-Claro, es que no había otra forma. En los años '70, cuando yo empecé mi carrera musical, la única vía para llegar al público era a través de las compañías discográficas. Yo al principio fui a hablar con dos o tres compañías discográficas y, como no tuve mucha recepción, hice lo que hicieron muchos en esa época: ir a los festivales de la canción. Eso era como ir a matar al toro, en el fondo, porque ahí había que ganarse el derecho, en el escenario. Durante mis primeros cinco años de carrera gané festivales como el de Viña, el Benidorm en España, la OTI en México, así que en ese período gané lo que era como el Grand Slam de la música, los tres festivales más importantes del mundo de habla hispana.
-Hoy se te ve muy atento a la plataforma digital, y también has estado muy activo en Twitter e Instagram.
-Sí, tengo presencia en esas redes, pero lo que hago es que dos veces a la semana ingreso a ver qué hay, para responder preguntas directas o saludos del público. Siento un gran respeto por el tema de las redes, pero vivo en la vida real. No vivo en la pantalla. Tengo una distancia con la pantalla, porque creo que puede ser algo medio distorsionador y deformador.
-Algunos piensan que la vida real, o la realidad como la conocíamos, ya no existe.
-Pero para mí sigue existiendo. Yo pertenezco a una generación donde la vida real tiene olor a pasto, olor a humo, olor a mar. La pantalla tiene un límite, al menos para mí, aunque sí aprovecho y aprecio mucho la oportunidad de poder conectarme directamente con las personas a través de esas redes, pero no paso pegado a la pantalla, y menos en este tiempo en que estoy componiendo. No quiero que la pantalla haga que me pierda el canto de los pájaros, el mirar a las personas a los ojos y darles la mano. La perspectiva de tener una vida virtual no me resulta muy atractiva.
"No quiero que la pantalla haga que me pierda el canto de los pájaros, el mirar a las personas a los ojos y darles la mano".
Fernando Ubiergo, cantautor.
"Escribí sobre el aborto en una época en que no se podía ni decir esa palabra".
Fernando Ubiergo, único chileno en ganar los festival de Viña del Mar, OTI y Benidorm.