Diego Gotelli C. - Medios Regionales

Unos gritos al anochecer alertaron a un residente de Las Condes, en la Región Metropolitana, quien al asomarse al exterior vio a personas salir de su casa vecina arrastrando a una mujer inconsciente para subirla a un vehículo y llevarla a un recinto asistencial, traslado en el que murió.

El hecho ocurrió este martes en calle Presidente Errázuriz con Bocaccio, donde funcionaba una clínica no autorizada a la que la víctima acudió para someterse a una cirugía estética. En el proceso, por motivos que se investigan, la mujer se descompensó, falleciendo antes de llegar a urgencias de la Clínica Cordillera, donde fue trasladada con ayuda de personal del recinto y vecinos que la socorrieron.

La víctima fue identificada como Leslie Vergara (32), madre de una niña de 10 años, quien asistió este martes a la segunda sesión de un aumento de glúteos que estaba realizándose en la supuesta clínica, que funcionaba en una vivienda residencial sin distintivos de ningún tipo.

El lugar, según confirmó la Seremi de Salud de la Región Metropolitana, atendía en la clandestinidad luego que en 2019 se le prohibiera su funcionamiento por prestar estos servicios sin contar con el permiso adecuado. En aquel año una quincena de mujeres protestó acusando negligencias en sus intervenciones, lo que derivó en que el municipio cancelara su patente comercial, que era de peluquería.

"Jugaron con la vida de una persona", criticó ayer la alcaldesa Daniela Peñaloza.

Por el nuevo hecho tres personas fueron detenidas y serán formalizadas el sábado por cuasidelito de homicidio. Entre ellos hay dos médicos cirujanos, comunicó Carabineros.

"Ellos parecían y hablaban como médicos, uno caía en el juego de ellos", señaló Javiera Alvarado, amiga de la víctima. Según contó, Leslie llegó a ese lugar por amistades que se habían realizado intervenciones allí. "No sabíamos que tenían funas", sumó.

Alvarado describió a su amiga como una mujer que "le gustaba verse bien" y que era emprendedora. Contó que vendía ropa de perros, y su madre, Nancy Vergara, manifestó que antes fue modelo y promotora. Era amante de los viajes y tenía planificado para marzo visitar Italia, además de analizar a futuro el radicarse en el extranjero.

La Fiscalía Regional del Biobío informó ayer la detención de una persona sospechosa de estar involucrada en el ataque que mató a Edgardo Huenteo, mecánico asesinado en un tiroteo en la comuna de Tirúa.

Con aporte de testigos presenciales del ataque, pericias del lugar y testimonios de los hechos posteriores al crimen, el Ministerio Público aseguró que fue posible reconstruir cómo ocurrió el crimen y dar con un sospechoso, un hombre de 23 años que hoy pasará a su control de detención y eventual formalización.

El ataque por el que se le imputarán cargos ocurrió el lunes cuando la víctima, un comunero mapuche de 45 años, recibió tiros de desconocidos en ataque que las familiares del mecánico creen iba dirigido a otra persona.

En la misma provincia de Arauco ayer se vivió una violenta jornada que dejó a tres trabajadores heridos en el límite entre Curanilahue y Los Álamos. Entre los lesionados hay uno que recibió un impacto de bala, otro una contusión en la cadera por golpe con un arma, y un tercero con trauma auditivo por la explosión de un neumático.

Además se reportó la quema de una decena de maquinarias y se viralizó un video que muestra a un encapuchado armado disparando a un camión y bajando a la fuerza al chofer.

Cuatro años y medio después de que una familia fuera extorsionada con el secuestro de su hijo, las autoridades anunciaron ayer la detención de una de las personas que habría estado detrás del delito cometido en junio del 2017.

Se trata de Gustavo Fuentes Aliaga, alias 'El Grillo', quien fue arrestado en Cerrillos luego de encontrarse evidencia en su hogar que lo vincularía a los hechos.

Según señalaron desde la PDI, en su domicilio habían especies como libros y ropas que aparecían en las fotografías que en su momento los captores enviaron a la familia del menor para extorsionarlos.

En dichos registros, los familiares denunciaron que aparecía su hijo siendo apuntado por un arma, imagen con la cual les exigieron un pago de 50 millones de pesos que no se concretó, siendo la víctima liberada tras una negociación con los detectives.

"Este sujeto participó directamente y facilitó su domicilio para mantener cautivo al niño", afirmó Magdalena Díaz, fiscal (s) de la Fiscalía de Alta Complejidad de la Zona Metropolitana Sur.

El nombre de Aliaga no es nuevo en el mundo policial. Fue uno de los imputado del "caso Bombas I", del cual posteriormente fue absuelto e indemnizado por el Estado de Chile, y en los últimos años ha sido arrestado por diversos delitos.