Quellón: con romería y misa despiden a tripulante desaparecido hace 22 días
La comunidad de Curanué y familiares recordaron al hombre de mar. Rastreo se mantiene de forma aleatoria y con mensajes de seguridad a las embarcaciones.
Con despliegues particulares y aleatorios, ya sin medios directos de búsqueda, se espera encontrar alguna pista de Sergio Alfredo Cárcamo Cárcamo (46), quien se encuentra desparecido hace 22 días tras caer al mar en Quellón. Incluso, su familia y amigos de Curanué realizaron una ceremonia que marcó una verdadera despedida para este tripulante.
La víctima se extravió en plena navegación de la lancha Odisea III, a unos 23 kilómetros al este de la ciudad porteña. Un área de rastreo comprendida entre la barra de Chaiguao y punta Tutil se cubrió por tierra, mar y aire, sin hallar evidencia de su paradero.
Medios navales se sumaron a más de una decena de embarcaciones civiles y equipos especializados como la Unidad de Rescate Acuático y Terrestre (URAT) de Osorno, para desarrollar durante la primera semana una exploración focalizada. Luego, las acciones se concentraron en puntos específicos, para después pasar a acciones aleatorias de parte de las naves que circulan por la zona.
Así lo detalló el capitán de puerto de Quellón, Ricardo Henríquez, remarcando que ante el sistema frontal que mantuvo los puertos cerrados en los últimas cinco días, "se llevaron a cabo patrullajes costeros-terrestres, en los cuales se verificaba en los cambios de marea si había algún rastro de la víctima o una evidencia que nos permitiera acercar su paradero. Pero no hay pistas".
Igualmente, el oficial precisó que se mantienen activos "los mensajes de seguridad para todos los navíos para que comuniquen cualquier antecedente sobre el caso en los momentos en que naveguen por el área".
Es más, los dispositivos ya cerraron su etapa de mayor despliegue, incluso por parte de los pobladores de Curanué, quienes conocieron a Sergio y salieron en masa a buscarlo.
Como sostuvo Adán Barrientos, presidente de la junta de vecinos local, "el rastreo organizado ya se dejó". Sin embargo, como inagotable gente de mar que vive en este poblado "cada vez que salgamos, más ahora que se viene el tiempo del erizo, vamos a estar 'ojo al charqui' para ojalá encontrar algún rastro de Sergio".
Para marcar este término del ciclo de rebusca y comenzar a despedir al tripulante, el domingo se realizó una romería en el estero Huildad, para luego efectuar una misa en la capilla de Curanué.
De acuerdo al dirigente, más de cinco lanchas "salieron por la bahía nomás debido al mal tiempo, para dejar coronas de flores, lanzar bengalas y decir adiós a nuestro amigo en el mar que tanto quería. Fue todo muy emotivo para cerrar una fase en la que se hizo todo por hallarlo".
Además, el líder social añadió que en la ceremonia religiosa, más de 150 personas llegaron al templo. "La comunidad se despidió con un sentimiento de pesar, pero también de tranquilidad, puesto que la gente acá es muy solidaria y comprometida, entregó todo para ubicar a Sergio", dijo.
Valoración
Por su parte, Francisca Cárcamo, hermana de la víctima, antes de partir a Puerto Aguirre (Región de Aysén) donde vive y después de reencontrarse con parientes y amigos de Curanué, valoró las actividades que se desarrollaron en recuerdo de su ser querido.
"Fue una linda ceremonia en el mar y una misa con mucha gente, que sirvió para cerrar un ciclo puesto que continúa desaparecido y ya nada más se puede hacer", reportó con resignación la pobladora, aunque no pierde la esperanza que alguna evidencia puede hallarse para recuperar el cuerpo del tripulante.