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Experiencia de docencia chilota fue parte de encuentro en México

Trabajo de escuela mexicana fue uno de los cuatro de América considerados en una panel temático.
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Recientemente se realizó II Encuentro de la Red STEM Latinoamérica, realizado en Monterrey, en México, con la participación de 12 países y organizado por Siemens Stiftung, cita en que se desarrolló el panel "STEM y territorios remotos de América". Dentro de las cuatro experiencias presentadas se dio a conocer el trabajo STEM (acrónimo en inglés de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) desarrollado por la académica y magíster Marcela Silva en la localidad quellonina de Compu, en el marco del proyecto de colaboración entre la Sede Puerto Montt de la Universidad Austral de Chile y Siemens Stiftung.

En este contexto, Sandra Antipani, directora de la Escuela Rural José Santos Lincomán de Compu, destacó que "para nosotros es una alegría inmensa que podamos dar a conocer nuestro quehacer, nuestra realidad a otras latitudes del mundo. Seguramente nuestra experiencia es la realidad de otras escuelas, pero el mensaje de que la innovación, vinculación y trabajo colaborativo es posible y abre un mundo de posibilidades, tanto en el trabajo pedagógico y evaluación como en las experiencia de aprendizaje de los y las estudiantes".

La profesional sumó sobre la presentación telemática de los isleños en este encuentro internacional que "esto puede ser replicado en otros rincones del planeta para formar a mejores seres humanos conscientes del entorno que tenemos y que nos sostiene."

Por su parte, Marcela Silva, académica del Instituto de Especialidades Pedagógicas UACh y quien trabajó directamente en esta iniciativa, indicó que "es gratificante para mí como profesora e investigadora haber sido parte de este importante evento y por sobre todo poder compartir esta experiencia única de formación docente Steam en contexto de ruralidad, en la cual profesoras y estudiantes desarrollaron competencias de sostenibilidad por medio del enfoque educativo Steam (ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas).

Así también, destacó que la formación recibida por las profesoras es parte de la investigación doctoral de la académica denominada: "Educación Steam+G, una oportunidad para formar ciudadanos y ciudadanas en sostenibilidad".

STEAM en Chiloé

Esta experiencia se relaciona directamente con la certificación de cuatro establecimientos y sus docentes como miembros/as de la naciente "Red de Profesores Steam para la Sostenibilidad, Territorio Chiloé", donde participaron las escuelas Básica Dalcahue de la ciudad homónima, Pedro Velásquez Bontes de Llau Llao y Rural de Quilquico de Castro y la mencionada José Santos Lincomán de Compu.

La formación del profesorado en "Educación Steam+G, una oportunidad para formar ciudadanos y ciudadanas en sostenibilidad" se realizó durante los meses de agosto a octubre por la magíster Silva.

La académica menciona que espera que esta iniciativa sirva de inspiración para otras escuelas rurales, de manera tal de democratizar el enfoque Steam y llevarlo a los profesores y estudiantes de los territorios más australes y apartados.

columna de opinión

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Los "otros" nuevos chilenos

En el complejo tema de los migrantes actuales en nuestro país, una de las situaciones que poco se ha analizado es la situación de sus hijos e hijas que, en la gran mayoría de los casos, han nacido en Chile. Legalmente tienen la nacionalidad por estar adscrito el país al ius solis (o derecho del suelo) en la Constitución Política de la República. De esta manera, adquieren una serie de beneficios vinculados a la salud y la educación. La madre, por ejemplo, puede solicitar control de su embarazo, atención de parto y el bebé se integra al Programa Chile Crece Contigo. Posteriormente, participan de los controles de atención al niño sano y postular a un jardín infantil de la red pública de Junji o Integra, continuando su educación en algún establecimiento de educación de este sector.

La migración en Chile en este último período y el nacimiento de los "nuevos" chilenos han ido favoreciendo el aumento de la población infantil, necesaria en los próximos años para el equilibrio poblacional, lo que es relevante en un país como el nuestro, cuya tasa de envejecimiento aumenta progresivamente. En otros aspectos, ha permitido que jardines infantiles y escuelas se enriquezcan con otras diversidades de lenguas, colores, saberes y haceres, en fin, todo lo que entregan las personas de diversas culturas, lo que es fundamental en un mundo de fronteras bajas y de muchas "diásporas" y migraciones por causas distintas.

Entre los migrantes que han llegado en los últimos veinte años los afrodescendientes provenientes en especial de Haití, República Dominicana, Cuba y otros países caribeños, además de Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, y también algunos de África, han ido teniendo sus hijos principalmente en tierra chilena y son, por tanto, chilenos.

En cuanto a su situación actual, el sector de salud los ha atendido a todos ampliamente. Sin embargo, en la macrozona norte, donde se concentra la mayor cantidad de partos de migrantes (Antofagasta con un 53,18% y Tarapacá con un 52,92%), están teniendo problemas.

ley y exclusión

En el sector escolar estos "nuevos" chilenos no tienen mayores problemas con sus compañeros y educadores; a veces sí, el racismo arraigado en muchos compatriotas hace que a ciertos padres no les agrade que sus hijos compartan con niños y niñas afrodescendientes. El problema mayor es que tienen otras limitaciones; paradojalmente la única ley que reconoce los afrodescendientes en Chile (N° 21.151) señala que lo son aquellos: "descendientes de la trata trasatlántica de esclavos africanos traídos al actual territorio nacional entre los siglos XVI y XIX y que se autoidentifique como tal" (artículo segundo).

La anterior situación excluye a padres e hijos de una serie de beneficios e incluso de participación en temas que les competen, como son las próximas consultas que se van a hacer al sector para reglamentar leyes que van a abarcar diversas áreas que los incumbe.

Urge entonces que se actualice esta ley; afrodescendientes chilenos que nacieron en Chile hace más de 18 años son ya ciudadanos. Al igual que otros migrantes, tienen derecho de participación por ellos y sus hijos. Su exclusión en el proyecto de Constitución anterior lo muestra; al parecer no hemos avanzado mucho en nuestras actitudes ciudadanas y de apertura a la diferencia.

"La migración en Chile en este último período y el nacimiento de los "nuevos" chilenos han ido favoreciendo el aumento de la población infantil, necesaria en los próximos años para el equilibrio poblacional, lo que es relevante en un país como el nuestro, cuya tasa de envejecimiento aumenta progresivamente. En otros aspectos, ha permitido que jardines infantiles y escuelas se enriquezcan con otras diversidades de lenguas, colores, saberes y haceres, en fin, todo lo que entregan las personas de diversas culturas".

María Victoria Peralta, académica de la UCEN (Universidad Central de Chile), doctora en Educación y ganadora del Premio Nacional de Ciencias de las Educación 2019