Carolina Larenas Faúndez

Cuatro de los 12 casos de tifus de los matorrales detectados en lo que va del año en la Región de Los Lagos corresponden a la provincia. Esta cifra refleja un aumento considerable, ya que en todo el 2022 se reportaron 5 infecciones.

A personas adultas, 50% hombres y 50% mujeres corresponden los actuales afectados por esta enfermedad transmitida por un ácaro y que fue descubierta por primera vez en el país y América Latina precisamente en Chiloé en el 2006.

De los casos reportados solo en las primeras semanas del año en el Archipiélago, dos se produjeron en Dalcahue y 2 en Quellón. A ellos se suman 3 en Calbuco, 1 en Puerto Montt, 1 en Hualaihué, mientras que otros 3 aún se encuentran en investigación epidemiológica.

A reforzar las medidas de prevención tras el alza de casos responde el llamado realizado por las autoridades de la Secretaría Regional Ministerial de Salud.

Karin Solís, seremi de Salud, explicó que "el tifus de los matorrales es una enfermedad emergente en nuestro país; el primer caso se dio en el 2006, pero posteriormente y dada la evidencia científica, hubo un mayor aumento de casos después del 2015".

Junto con ello, sostuvo que "lo que nos preocupa es que este año, desde enero en la semana 5 epidemiológica tenemos 12 casos confirmados, tenemos además uno que fue descartado y otro que está en estudio".

La enfermera agregó que "mayoritariamente es de predominancia en Chiloé, por lo tanto, nuestra preocupación por este aumento de casos es a la prevención. Esta es una bacteria de origen molecular: Orientia tsutsugamushi, también hay una variante chiloense".

Fiebre sobre 38 grados, manchas en todo el cuerpo, costra o mancha negra (en el sitio donde mordió el ácaro), escalofríos, sudor abundante y dolor de cuerpo y cabeza son parte de los síntomas de esta enfermedad.

Asimismo, la seremi comentó que "la forma de transmisión es en actividades que son rutinarias de nuestra gente; por ejemplo, donde hay acopio de leña, en el camping, en algunas actividades de trekking; esta es una zoonosis, por lo tanto, se produce cuando el ser humano tiene contacto con la naturaleza".

Sumó que "nuestro llamado es a que tengamos mucha más prevención en las actividades que se desarrollan al aire libre, por ejemplo, en los acopios de leña cuidemos que tengamos cubierta la mayor parte de nuestra piel, para quienes hacen trekking que usen senderos habilitados para ello".

Por su parte, Alejandra Beltrán, encargada regional de la Unidad de Zoonosis, detalló que "en general los casos se han dado 50% en hombres y 50% en mujeres, con una mediana de edad de 48 años, principalmente dado por las características de exposición al vector en que las personas realizan actividades al aire libre".

Lesiones

Del mismo modo, describió que "muchas de las lesiones se han dado en los brazos, en el tórax porque uno al llevar leña hacia su casa la pone en los brazos, en el cuerpo y en el lugar de la piel que esté descubierto puede ingresar este ácaro e inocular el agente".

La profesional añadió que "tenemos que relevar que durante la pandemia hubo un silencio epidemiológico de muchas enfermedades; ahora las personas han empezado a salir más, a retomar sus actividades normales, entonces los equipos asistenciales están diagnosticando más".

A su vez, Jacqueline Cáceres, encargada regional de la Unidad de Epidemiología, mencionó que "hasta el momento solo se ha identificado en la Región de Los Lagos; hay evidencias con las primeras detecciones que lo trabaja la Universidad Católica en Chiloé y, posteriormente, en Aysén y la provincia de Llanquihue".

Igualmente, relató que "lo más importante es la consulta oportuna, por ejemplo, si tengo algunos de los síntomas o yo haber realizado una actividad de probable riesgo, consultar de forma inmediata, porque en general los casos que llevamos han sido de manejo ambulatorio, no hemos tenido hospitalizados, no ha sido complejo".

Si bien por ahora no se han generado casos graves, en otros países se han reportado decesos debido a esta infección.

La docena de casos reportados hasta ahora se han confirmado por técnica de biología molecular, siendo todos adultos con edades que van desde los 20 a los 61 años.

"En general los casos se han dado 50% en hombres y 50% en mujeres, con una media de 48 años".

Alejandra Beltrán, encargada regional de la Unidad de Zoonosis de la Seremi de Salud.

38° grados de fiebre es uno de los síntomas, así como erupciones cutáneas.