Pedro Bárcena González
A más de 13 meses de realizada la exhumación del cadáver de Claudio Manquemilla (24) desde el cementerio de Terao, comuna de Chonchi, los parientes del joven fallecido en enigmáticas circunstancias esperan por el conocimiento de los nuevos informes tanatológicos. Hasta el momento no han tenido acercamiento con el Ministerio Público, aunque se confirmó la evacuación de estas diligencias.
Los restos del joven que perdió la vida en julio del 2011 -permaneció 11 días desparecido hasta ser hallado en el canal Yal- fueron levantados del camposanto el 5 de octubre del año pasado, con el objetivo de ser analizados en el Departamento de Antropología Forense del Servicio Médico Legal de Concepción, como también en el SML de Santiago.
De acuerdo a Miguel Loncón, vocero de la familia chonchina, las autoridades investigativas habían señalado que en seis meses se conocerían los resultados de estas pericias. "Ya ha pasado más de un año, un tiempo suficiente para tener los informes", aclaró.
Es más, el vecino aclaró que no han tenido contacto con el fiscal que lleva la causa, Rodrigo Valladares, "por lo menos para presionar por este tema", acotó.
Pese a los cuestionamientos de los cercanos a la víctima, el persecutor explicó que las pesquisas científicas derivadas de la exhumación ya fueron evacuadas.
"Los resultados conclusivos ya se conocen, tanto de las pericias del SML de Concepción y Santiago. También fue evacuado el informe pericial del médico criminalista de la Brigada de Homicidios de la capital (Iván Pavez), quien participó de la diligencia en Terao", aseveró el representante del Ministerio Público.
Más allá de la necesidad de reserva de esta indagatoria y la lógica interacción que se espera tener con la familia Manquemilla, el fiscal adelantó que los nuevos estudios no arrojan rasgos de violencia o intencionalidad en el deceso del joven, tal como se manejaba hasta antes de esta pesquisa clave.
"La construcción investigativa no ha mutado de manera significativa, o sino habrían personas encausadas en virtud de un eventual ilícito. El curso investigativo se ha mantenido similar a lo que se pudo apreciar con lo realizado por los otros fiscales que ha tenido la causa", apuntó el abogado.
Para ser más específico, Valladares confirmó que "no hay antecedentes conclusivos de la intervención de terceros", más allá de la pretensión de los parientes, quienes se querellaron por homicidio calificado, incluso identificando a dos personas partícipes de lo que aseguran fue un crimen.
No obstante, hasta que no se cierre la investigación, el persecutor dijo que no se descarta ninguna hipótesis y que se espera hasta la última pericia antes de esgrimir una conclusión definitiva.
declaración
Bajo este escenario, como una de las diligencias más inmediatas está la toma de declaración a un funcionario de inteligencia de Carabineros, quien presentó un informe que tendría antecedentes relevantes sobre las circunstancias relacionadas a la muerte del trabajador.
Tales datos emanaron en el marco de la arista paralela que se sigue en este caso, relacionada a la investigación a fiscales y policías por supuesta omisión de denuncia y obstrucción a la investigación.
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En octubre, Miguel Loncón se reunió con el abogado Rubén Jerez, quien sustenta la querella por homicidio calificado, con objeto de analizar los próximos pasos a seguir en la causa. En ese instante, apuntaron a acelerar los informes tras la exhumación, pero también tienen otros planes. "Vamos a ir a la Fiscalía Nacional para pedir explicaciones por los atrasos en este caso; además, solicitaremos la anulación de estas últimas diligencias porque está todo mal hecho", acotó el vocero de la familia Manquemilla.
